WASHINGTON. Como si fuera un sismo, el debate sobre la acogida de refugiados sirios tras los atentados de París ha sacudido esta semana la campaña presidencial en EU, donde ha estallado una gran polémica azuzada por los candidatos republicanos.
Aunque falta casi un año para las elecciones a la Casa Blanca, la campaña se ha caldeado tras los ataques terroristas cometidos el pasado 13 de noviembre en París, que se atribuyó el grupo yihadista Estado Islámico (EI) y causaron 130 muertos y más de 350 heridos.
Los candidatos a la nominación presidencial republicana no han escatimado en críticas al plan del presidente de EU Barack Obama, para recibir a 10 mil refugiados que huyen de la guerra en Siria.
A raíz de informaciones que apuntan a que uno de los autores de los ataques en París llegó a Europa dentro de la ola de sirios que escapan de la guerra en su país, los conservadores han puesto el grito el cielo para agitar su temor a que miembros del EI puedan entrar a EU infiltrados entre los refugiados.
Pese a las garantías del gobierno sobre el rigor en el escrutinio de los refugiados y la insistencia de Obama en “dar refugio a los sirios más vulnerables”, una treintena de estados en el país -casi todos gobernados por republicanos- han advertido de que echarán el cerrojo y no ampararán a estas personas en sus territorios.
Por si fuera poco, la Cámara de Representantes, de mayoría republicana, aprobó el jueves un proyecto para endurecer los requisitos de admisión de refugiados sirios, pese a la advertencia de Obama de que vetará ese texto legislativo.
EI podrían entrar como un “caballo de Troya” en EU: Trump
En este contexto, el magnate Donald Trump, que encabeza varias encuestas de intención de voto para la nominación presidencial republicana, ha alertado de que terroristas del EI podrían entrar como un “caballo de Troya” en EU, camuflados como refugiados.
Trump, que sostiene un discurso muy crítico contra la inmigración ilegal, respaldó esta semana la idea de crear una base de datos para monitorear a los musulmanes, así como el cierre de mezquitas, a fin de combatir el terrorismo islamista.
Pero después de muchas críticas, el magnate se distanció de la idea de la base de datos, al asegurar que no fue él quien la sugirió, sino que lo hizo un “periodista”, e insistió en que lo que respalda es una “lista de observación” de sospechosos de terrorismo.
En tanto, el neurocirujano retirado Ben Carson, otro de los favoritos en los sondeos de los republicanos, llegó a comparar su inquietud hacia los refugiados sirios con la preocupación de los padres sobre los “perros rabiosos”.
“Si hay un perro rabioso merodeando en tu vecindario, probablemente no vas a esperar nada bueno de ese perro. Y, probablemente, vas a poner a tus hijos a salvo. Eso no significa que odies a todos los perros”, dijo Carson este jueves en Alabama.
También han echado leña al fuego otros aspirantes presidenciales republicanos, como el senador de origen cubano Ted Cruz y el exgobernador de Florida Jeb Bush, partidarios de acoger solamente a sirios que prueben su fe cristiana.
Para Thomas E. Mann, analista político del centro de estudios Brookings en Washington, esos comentarios no han sido “edificantes en absoluto, aunque sí esperados por parte de los candidatos republicanos, especialmente de cara a las elecciones primarias”.
Ese tipo de retórica “posiblemente” atraiga votos en 2016, según comentó a Efe Mann, quien cree, no obstante, que es “muy pronto” para calibrar el impacto de temas como la crisis de los refugiados y el terrorismo en los comicios presidenciales.
“Si el temor a los inmigrantes o el terrorismo sigue siendo primordial, eso ayudará a los republicanos”, vaticinó.
Frank Sesno, ex corresponsal de la cadena CNN en la Casa Blanca, cree que la “sorprendente” reacción de los republicanos puede dar frutos electorales “a corto plazo”.
Sin embargo, precisó a Efe, “dudo que funcione a largo plazo porque es una retórica basada en la propagación del miedo (…) y eso no funciona si la gente no tiene miedo de forma irracional. Dependerá de los acontecimientos”.
“Creo -prosiguió- que los candidatos republicanos han sido oportunistas al aprovechar el miedo en EU como resultado del ataque en París”, con el fin de “señalar con el dedo al gobierno de Obama y los extranjeros”.
El propio Obama, visiblemente molesto, reprobó el miércoles desde Manila la “retórica” de los republicanos, al acusarlos de estar “asustados de que viudas y huérfanos vengan a EU”.
Y el vicepresidente estadunidense, Joseph Biden, dijo que volver la espalda a los refugiados sirios supone poner “las cosas en bandeja a los terroristas” del EI, que promueven un “choque de civilizaciones”.
En opinión de Sesno, el candidato que más se ha beneficiado de la polémica “parece ser Trump, si juzgamos las encuestas, porque esto juega a favor de la opinión de Trump de que EU es vulnerable”.
Desde el Partido Demócrata, la candidata Hillary Clinton, gran favorita para lograr la nominación presidencial, ha condenado la “retórica ofensiva” de sus adversarios republicanos.
“Este no es el momento de anotarse puntos políticos”, aseveró Clinton este jueves en un discurso en Nueva York, donde recordó las “obligaciones humanitarias” de EU y se negó a “dar un portazo a todos los refugiados sirios”.