GREEN BAY. El pase que conectara con la victoria nunca llegó. Los Empacadores de Green Bay cayeron 13-17 ante los Osos de Chicago en un duelo atípico, en el que su pasador estrella Aaron Rodgers no consiguió dar el pase definitivo en cuatro oportunidades en la yarda 8 de su oponente en una serie ofensiva de 13 jugadas.
La derrota mermó el buen ánimo de Rodgers, quien consiguió su pase de anotación 250 de por vida, con lo que se convirtió en el que más rápido lo consigue en la historia. Y lo hizo justo en día en el que su equipo honró al que ha sido por lo pronto, su más ilustre quarterback, Brett Favre, a quien, cómo van las cosas, Rodgers puede superar. Lo supera de hecho, en muchos números relativos, esto es, en porcentajes, que no en totales. Por ejemplo, en pases conectados de más de 30 yardas, el promedio de Favre fue de 19.9, mientras que el de Rodgers es por ahora de 23.7 por ciento.
Pero esta vez tuvo que conformarse con un solo pase de anotación y uno interceptado, ganando unas discretas 202 yardas con 22 de 43 pases completados, lo que hace dudar si no es que la lesión que arrastra en el hombro le está costando en cuanto a efectividad.
Del otro lado, Jay Cuttler logó 200 yardas con 19 pases completos de 31 envíos, también, con una touchdown. La diferencia la hizo la carrera de Jeremy Langford, de una yarda en el segundo cuarto.