El cantautor y poeta cubano Silvio Rodríguez, reconocido como uno de los principales exponentes de la llamada “Nueva Trova Cubana”, llega a sus 69 años de edad recorriendo los barrios de la Habana con su “Gira Interminable”.
Desde finales de 2010, el compositor encabeza un grupo de músicos, escritores y artistas para la realización de conciertos gratuitos.
El pasado 20 de noviembre, Buena Vista Social Club fueron los amigos que acompañaron a Silvio para el show número 70 de su “Gira interminable”, que se llevó a cabo en la calle Apodaca, esquina a Zulueta; en el barrio de Jesús María, municipio Habana Vieja.
Se trató de un encuentro magistral frente a centenares de personas de las dos trovas cubanas, la tradicional y la nueva.
Por otra parte, el trovador cierra de la mejor manera el año ya que hace unos días ganó el Grammy Latino por Mejor Video Musical Versión Corta, gracias a su colaboración con Calle 13 en el clip “Ojos color sol”.
El audiovisual fue dirigido por el puertorriqueño René Pérez Residente y el argentino Kacho López, y estuvo protagonizado por el actor mexicano Gael García Bernal y la actriz española María Valverde.
Silvio Rodríguez Domínguez nació en el seno de una familia campesina el 29 de noviembre de 1946, en San Antonio de Los Baños, un pueblo ubicado en un valle fértil de la provincia de La Habana, Cuba, una zona predominantemente tabacalera.
Su abuelo fue tabaquero, su padre, Víctor Rodríguez, un campesino liberal y de ideas socialistas, y su madre, Argelia Domínguez, una peluquera. La afición de Silvio por la música le vino por su progenitora, quien se pasaba el día cantando boleros y sones; hasta lo dormía con canciones de la trova.
Silvio también ha sido alfabetizador, empleado gastronómico, dibujante y soldado. Laboró en la televisión cubana y formó parte del Grupo de Experimentación Sonora del Instituto Cubano de las Artes y de la Industria Cinematográfica (ICAIC), donde hizo música para el Séptimo Arte.
Parte de esas grabaciones fueron recopiladas en discos como “Cuando digo futuro” y “Memorias”. Ahí fue donde grabó sus primeras producciones y canciones, aunque comenzó a escribir poemas a los siete u ocho años.
En la revista “Mella” dibujó una historieta llamada “El hueco”, con textos profundos de Norberto Fuentes.
Allí también aprendió los primeros acordes de guitarra con su compañero Lázaro Fundora. A los 16 años retomó los estudios de piano, pero los abandonó de nuevo cuando fue llamado al Servicio Militar Obligatorio, de las Fuerzas Armadas Revolucionarias.
Después se compró una guitarra y fue en el Ejército donde aprendió a tocarla. A partir de ese momento no abandonó jamás dicho instrumento y tampoco dejó de escribir poemas; asimismo, compuso algunos relatos.
Entre 1964 y 1965 escribió sus primeras canciones y en 1967 debutó en el programa de televisión “Música y estrellas”.
Su primera actuación fue en el Museo de Bellas Artes y por esa época hizo un dueto con Luis López, con quien interpretó sus cortes. Así, se presentaron en dos ocasiones en festivales de aficionados de la FAR y aunque no resultaron premiados, fueron felicitados.
En 1975, cuando llevaba ocho años de profesional y había compuesto cientos de canciones, grabó su primer disco en solitario titulado “Días y flores”. También formó parte del Movimiento de la Nueva Trova, reconocida en el mundo.
Además de tener la capacidad de atraer a todo tipo de público, Rodríguez colaboró con un gran número de cantantes y músicos internacionales.
Otros de sus discos son: “Mujeres”, “Rabo de nube”, “Unicornio”, “Tríptico volumen uno, dos y tres”, “Causas y azares”, “Oh, melancolía”, “Silvio Rodríguez en Chile”, “Mano a mano”, “Rodríguez” y “El hombre extraño”, “Descartes”, “Mariposas”, “Expedición” y “Cita con ángeles”, entre otros.
El 20 de noviembre de 2006 se presentó en un mitin político, que se desarrolló en el Zócalo de la Ciudad de México, donde cantó algunas de sus composiciones, pese al intenso frío que se sintió ese día.
Los días 25 y 26 de ese mismo mes el cantautor fue homenajeado en Cuba por más de 40 trovadores, entre ellos, Gerardo Alfonso, Erick Sánchez, Vicente Feliú y Frank Delgado, quienes festejaron por adelantado con canciones su cumpleaños número 60 en un pequeño escenario instalado en el patio del Centro Pablo de la Torriente de La Habana Vieja.
En 2007, realizó una gira por México, Chile, Perú, República Dominicana y por primera vez tres países de Centroamérica: El Salvador, Guatemala y Nicaragua.
En septiembre de 2009 intervino en el concierto “Paz sin fronteras”, que se realizó en La Habana, y en el que participaron Juanes, Miguel Bosé y Amaury Pérez, entre otros, además de ser objeto de homenaje por artistas venezolanos y cubanos en el Museo de Bellas Artes, en Caracas.
En 2010, Rodríguez lanzó un blog titulado “Segunda cita”, donde comenzó a publicar su bitácora personal en línea, que el autor utiliza como espacio para comentar acerca de temas históricos, deportivos, políticos y culturales.
En ese mismo año fue presentado el libro “Silvio, aprendiz de brujo”, una investigación del periodista mexicano Eduardo Valtierra; en días anteriores a ese suceso, Rodríguez fue honrado por el Premio de las Artes que le confirió el Fondo Cultural Alianza Boliviana para los Pueblos de Nuestra América.
Un año después, el cantautor realizó una gira de conciertos para promocionar su álbum “Segunda cita”.
En 2012, ofreció un gran concierto en Chile, donde interpretó sus grandes éxitos como “Mujeres”, “En estos días”, “El necio”, “Crisis”, “El gigante”, entre otras.
Al año siguiente, el músico realizó una serie de conciertos en diversos lugares de México como Toluca, Estado de México; Guadalajara, Jalisco; Puebla y el Distrito Federal, donde deleitó a miles de fanáticos con sus grandes éxitos.
Asimismo, recibió un homenaje en Bolivia, donde una constelación de músicos, cantautores y compositores se dieron cita en las instalaciones del Teatro Municipal Alberto Saavedra.
En 2014, el cantautor ofreció un concierto en el Parque del Estadio Latinoamericano, ubicado en Cuba, como parte de su gira por los barrios.