El coordinador de la fracción del PRD en San Lázaro, Francisco Martínez Neri, criticó la aprobación del dictamen que permite que los elementos de guardia y seguridad ingresen armados a los salones de la Cámara de Diputados, con el fin de “garantizar y salvaguardar en todo momento la soberanía”.
La Comisión de Régimen, Reglamentos y Prácticas Parlamentarias modificó, el martes pasado, un párrafo del artículo 12 de la Ley Orgánica del Congreso General, el cual establece que “queda estrictamente prohibido el ingreso de cualquier persona armada a los salones de sesiones de las Cámaras, salvo que medie causa grave que lo amerite, se trate de fuerza pública y lo haya ordenado el Presidente del Congreso, de la Cámara respectiva, o de la Comisión Permanente, según corresponda”.
Martínez Neri anticipó que el Sol Azteca rechazará dicho documento, pues nos situaríamos, dijo, “en la época de los gorilatos”.
“Cómo se puede pensar en regular una situación inédita en México, lo último que ocurrió fue en la época en que Eduardo Neri hace un pronunciamiento, en la época de Belisario Domínguez, en la época de Huerta, en donde hay una irrupción en la Cámara”, recordó.
Martínez Neri expresó que hoy el presidente de la Cámara de Diputados es el garante de la seguridad y tiene muy claras las disposiciones en el reglamento.
“No encuentro motivo para regular una situación como ésta, el ingreso de personas armadas, obviamente con la aprobación de alguien me parece algo totalmente fuera de la realidad y fuera de la normalidad política”, añadió.