PANAMÁ. El fallo del Tribunal Supremo de Panamá que ordena la detención provisional de Ricardo Martinelli dio inicio al proceso para la búsqueda y captura del expresidente por un caso de escuchas ilegales a más de 150 personas durante su gobierno (2009-2014).

 

El pleno del Supremo autorizó el lunes al magistrado juez de garantías del caso, Jerónimo Mejía, a ejecutar la orden de detención de Martinelli, un proceso para el que la ley panameña no establece un plazo y que puede ser largo y «difícil», dijo el abogado Ernesto Cedeño.

 

El letrado precisó que Mejía debe ahora decidir cuál mecanismo activará para pedir la detención del exmandatario y actual diputado del Parlamento Centroamericano (Parlacen), quien dice ser un «perseguido político» de su antiguo vicepresidente y ahora gobernante de Panamá, Juan Carlos Varela.

 

Mejía tiene a su disposición un Tratado de Asistencia Legal Mutua firmado con Estados Unidos, donde está Martinelli según sus abogados, y también un Tratado de Extradición, y ambos implican «mucha documentación» e involucran al Ejecutivo panameño.

 

Por su parte el fiscal acusador, Harry Díaz, quien pide hasta 21 años de cárcel para Martinelli, recomendó al ex presidente comparecer ante la Justicia y evitar la «vergüenza» de ser «perseguido» y «detenido».

 

El equipo defensor del ex gobernante insiste en que el proceso judicial por el caso de las escuchas está plagado de errores, como que se haya acusado a Martinelli sin antes haberse celebrado una audiencia de imputación de cargos.

 

Martinelli salió de Panamá el pasado 28 de enero, cuando el Supremo abrió la primera causa penal en su contra por un caso de compra de alimentos con supuestos sobrecostes a través del gubernamental Programa de Ayuda Nacional (PAN).

 

Hasta ahora el Supremo ha abierto un total de seis causas penales a Martinelli por diversos casos de corrupción, muchas de las cuales ya tienen en prisión con o con medidas cautelares a una decena de exministros y ex altos funcionarios de su gobierno.