A unas horas de haber tomado posesión como alcaldesa de Temixco, Morelos, Gisela Mota Ocampo fue asesinada en su domicilio. Por el crimen fueron detenidos tres sospechosos y dos más resultaron abatidos; de igual forma el gobierno del estado reactivó el protocolo de protección para todos los presidentes municipales, que se anunció desde marzo del año pasado.
Graco Ramírez Garrido, gobernador de la entidad, por su parte, anunció la implementación del modelo de Mando Único para 15 municipios de la entidad, tras una reunión con autoridades locales y federales en la que se abordó la estrategia de seguridad en Morelos.
Con sólo 14 horas como presidenta municipal, la funcionaria perredista fue acribillada al interior de su hogar, ubicado en dicho municipio, hasta donde llegó un comando para asesinarla durante la mañana del sábado, un día después de haber tomado protesta.
En respuesta, efectivos pertenecientes al Modelo de Mando Único estatal lograron aprehender a tres sospechosos: un menor de edad, un joven de 18 años, y una mujer de 32 años; tras una persecución otros dos implicados fueron abatidos.
Por el hecho violento, el mandatario estatal sostuvo ayer que el homicidio de la recién nombrada alcaldesa se trataba de “una clara amenaza para que los nuevos alcaldes no acepten el esquema de Mando Único que hoy se construye a nivel nacional”, publicó ayer a través de su cuenta de Twitter.
En otros mensajes vertidos a través de la misma red social, el mandatario señaló que el atentado de Gisela Mota ocurrió en el marco de transición de alcaldías, y al tomar posesión ratificó la implementación del Mando Único. “En el gobierno de Morelos no daremos ni un paso atrás y no cederemos a amenazas de grupos de la delincuencia organizada”, advirtió.
Desde el mismo sábado en que se registró el asesinato, y por instrucciones del gobernador Ramírez Garrido, el gabinete de seguridad en la entidad reactivó el mecanismo para brindar seguridad a los 33 presidentes municipales que conforman el estado, el cual presuntamente se habría puesto en marcha para los entonces precandidatos a inicios de 2015.
Pese al hecho, y la negativa de algunos ediles por la puesta en marcha del modelo único, el titular del ejecutivo estatal anunció que, conforme a sus facultades constitucionales, el gobierno estatal asumirá la seguridad en 15 municipios: Cuernavaca, Temixco, Jojutla, Zacatepec, Emiliano Zapata, Ayala, Ocuituco, Xochitepec, Huitzilac, Jiutepec, Tlayacapan, Temoac, Jantetelco, Tepalcingo y Tlaquiltenango.
Advirtió obispo del presencia del narco
Ramón Castro Castro, obispo de la Diócesis de Cuernavaca, aseguró que al menos tres municipios de Morelos están bajo el control del crimen organizado: Puente de Ixtla, Coatlán del Río y Amacuzac y que la muerte de la alcaldesa Gisela Mota es solo una muestra de la violencia en la entidad.
Luego de celebrar una misa de cuerpo presente por la muerte de la funcionaria asesinada la mañana del sábado, el Obispo dijo que este crimen debe ser un punto para reflexionar sobre la estrategia de seguridad en la entidad.
“Aunque se ha hecho algo, no es suficiente, y que algo está fallando ciertamente, algo está fallando y habría que buscar la estrategia adecuada para poder responder a la tremenda demanda de seguridad que exige y pide y solicita el Estado”, afirmó el líder religioso.
El prelado afirmó que el atentado es una advertencia para los demás presidentes municipales.
“‘Si no cooperas con el crimen organizado mira lo que te va a pasar’ y eso es atemorizarlos, ¿qué otra cosa? Es una tesis, yo no sé si eso es verdad o no, pero uno lo puede pensar sin tener necesidad de meditar demasiado”, aseveró.
Detienen y abaten a sospechosos
Tras el atentado contra Gisela Mota, y el operativo para ubicar a los responsables, los titulares de la Fiscalía General y de Seguridad Pública del estado, Javier Pérez Durón, y Alberto Capella Ibarra, respectivamente, ofrecieron una conferencia de prensa en la que además de confirmar las detenciones, indicaron que tras un enfrentamiento con los probables implicados, los elementos pudieron asegurar: una camioneta Jeep Cherokee con placas de circulación del estado de México, chamarras, pasamontañas, un arma de fuego calibre 9 mm abastecida con 30 cartuchos útiles y un arma de fuego tipo UZI semiautomática abastecida con 30 cartuchos útiles.
De forma extraoficial se ha vertido la versión de que el ataque fue orquestado por integrantes del grupo criminal conocido como Los Rojos, sin embargo, hasta el cierre de esta edición, las autoridades no habría confirmado dicha información.