PARÍS. El número de aspirantes a entrar en el Ejército francés se ha multiplicado por 10, al pasar de 150 a mil 500 diarios, tras los atentados yihadistas perpetrados en París en enero y en noviembre del pasado año.
Las cifras las ofreció el ministro francés de Defensa, Jean-Yves Le Drian, en un discurso a sus soldados desplegados en la base de Camp Zayed en los Emiratos Árabes Unidos divulgado por su departamento, en el que subrayó la importancia de su misión contra las posiciones del Estado Islámico en Siria e Irak.
Le Drian insistió en que la acción contra el grupo yihadista en esos dos países, pero también las labores de protección antiterrorista que realizan 10 mil militares en el propio territorio francés, son necesarias porque para proteger a los franceses “la guerra debe hacerse en todos los frentes”.
Le Drian señaló que “para destruir a (su) enemigo” -en alusión al EI- se han intensificado los bombardeos de la coalición internacional de la que forma parte Francia (y que lidera Estados Unidos), pero también hay que actuar sobre el terreno con “nuestros socios locales”.
Por eso, justificó que las tropas francesas estén formando a los kurdos iraquíes en el norte de Irak y a las fuerzas iraquíes en Bagdad.