Con la llegada del nuevo Boeing 787-8 Dreamliner, el actual avión presidencial, con 28 años de servicio, seguirá en la flota como reserva del Estado Mayor Presidencial (EMP).
Según información de Presidencia de la República, el avión ya no cumple con los estándares internacionales de aviación; cabe destacar que durante su existencia, el “Presidente Juárez” transportó a cinco mandatarios (seis, si se cuenta a Miguel de la Madrid, quien ordenó su compra), realizó más de mil giras nacionales e internacionales, fue comprado en 1987 y fue dado de alta en la flota de Presidencia desde 1988.
Incluso, en varias ciudades del mundo, explican, el actual avión presidencial tiene prohibido aterrizar por la alta contaminación sonora que genera.
Otro de los factores de riesgo es la merma en la autonomía de vuelo debido a la modificación en sus tanques de combustibles, esto a causa de la falta de refacciones de ese modelo.
Las refacciones para ese tipo de avión, Boeing 757, dejaron de fabricarse en 2005; ante ello, el Estado Mayor tuvo que buscar alternativas para que la aeronave continúe en funcionamiento. Por ejemplo, los tanques de gasolina ya no son del modelo original y fueron substituidos por otros de menor capacidad.
De acuerdo con la Presidencia, “si bien el avión Boeing 757-225 Presidente Juárez opera con altos estándares de seguridad, ha volado por más de 28 años y presenta signos inevitables de añejamiento y obsolescencia. Por ejemplo, está impedido a aterrizar en distintas ciudades del mundo por los niveles de contaminación sonora que emite, lo que reduce la eficiencia en el desarrollo de la agenda presidencial”.
Entre 1987 y 2015, el actual avión presidencial acumuló más de ocho mil horas de vuelo, realizó dos mil 662 vuelos en 953 giras nacionales y 323 internacionales; llevó a cabo cuatro mil 668 aterrizajes y 154 escalas en viajes transatlánticos.
En 2015, el Boeing 757-225 transportó a cinco mil 151 pasajeros, 60% de los cuales fueron periodistas, informó la Presidencia. De hecho, uno de sus últimos viajes internacionales es el que esta semana realiza el presidente Enrique Peña Nieto por Medio Oriente y Suiza. Y aunque todavía no es oficial, a finales de enero todavía podría transportar al mandatario a Ecuador para la Cumbre Celac.
Sobre la aeronave, la Presidencia añade que “el modelo B757-225 se dejó de fabricar en 2005, el abastecimiento de partes y suministros es cada vez más escaso, lo que incrementa su costo y tiempo de mantenimiento. Precisamente porque ya no existen refacciones para los tanques de combustible con los que se configuró originalmente, éstos tuvieron que sustituirse por otros de menor capacidad lo que reduce su autonomía de vuelo, obligando a realizar un mayor número de escalas en trayectos transoceánicos”.
Para substituir al “Presidente Juárez”, se informó que en las próximas semanas aterrizará en México el Boeing 787-8, bautizado como “Morelos”, el cual estará en servicio para los próximos cinco mandatarios; por tanto, “el avión Boeing 757 se mantendrá como parte de la flota aérea del Estado Mayor Presidencial. Fungirá como avión de respaldo cuando el avión “José María Morelos y Pavón” se encuentre en mantenimiento”.
