DAVOS. La economía de China ha entrado en una fase de “nueva normalidad”, con un tipo de crecimiento que intentará concentrar más en la calidad que en la velocidad del mismo, dijo el vicepresidente de ese país, Li Yuanchao.
China es uno de los protagonistas de la 46 edición del Foro Económico Mundial que reúne a dignatarios, magnates, ejecutivos y académicos, en el que la desaceleración de la segunda economía del mundo ha sido uno de los temas más comentados.
Durante su intervención, Li describió este nuevo periodo como de “crecimiento más estable” y basado en una mayor diversificación de los sectores que lo sostienen.
“Para esta nueva normalidad necesitamos cambiar el modelo de crecimiento, cambiar el concepto de desarrollo, la manera como crecemos, y centrarnos más en la calidad que en la velocidad”, afirmó Li.
“La prioridad de China en los próximos años será mantener un crecimiento medio-alto”, precisó Li, quien aseguró que su país mantiene su atractivo para los capitales internacionales.
Detalló que el año pasado se recibieron 126 mil millones de dólares de inversiones directas, 5.6% más que en 2014.
La disminución del ritmo de crecimiento que China mantuvo durante un decenio supuso una rebaja de su demanda de materias primas, lo que contribuyó a la caída de sus cotizaciones a lo largo de 2015.
“China sigue siendo la mayor fuerza motora del crecimiento global”, destacó el político, ante los temores que ha causado la confirmación de que su economía progresó 6.9% el año pasado y que la proyección para 2016 es de 6.8%, frente a las cifras de dos dígitos que presentaba hasta hace pocos años.
Para confirmar la fortaleza económica de China, Li explicó que el PIB creció en 2015 en 500 mil millones de dólares, el mayor incremento a nivel mundial en una economía que está valorada en 10 billones de dólares.
Destacó que el consumo interno experimentó un crecimiento de 66.4% en 2015, lo que representó 15.4% más que en el ejercicio anterior, mientras que las inversiones se incrementaron en 30.3%.
El sector servicios, por su parte, progresó 2.4% y actualmente representa 50.5% de la economía de China, país que, garantizó Li.