WASHINGTON. El presidente de Barack Obama, cree que la condición de favorita en la que parte Hillary Clinton para ser la candidata demócrata a la Casa Blanca es un privilegio y una “carga”, mientras que su rival Bernie Sanders entró en la campaña con el “lujo” de ser considerado “un perdedor”.
“Bernie entró con el lujo de ser un completo perdedor (…). Creo que Hillary llegó con el privilegio y la carga de ser percibida como la favorita”, dijo Obama en una entrevista con el diario Politico.
A juicio de Obama, la que fuera su secretaria de Estado está sometida a un mayor escrutinio que el senador Sanders, su principal rival en la contienda por la nominación presidencial demócrata, y eso “es una desventaja para ella”.
“Ella tiene una experiencia extraordinaria, y es increíblemente inteligente y conoce cada política”, comentó Obama en la entrevista.
Sobre la estrategia de campaña de Sanders, basada hasta ahora en denunciar la desigualdad de ingresos en EU, Obama advirtió en la entrevista que como presidente uno “no tiene el lujo de centrarse en una sola cosa”.
Lo que está haciendo Sanders “está funcionando”, aseguró Obama, que a continuación alertó, no obstante, de que a medida que avanza el proceso electoral los candidatos se ven abocados a “superar una serie de obstáculos que los votantes van a poner delante de ti”.
En la entrevista, Obama rechaza las comparaciones entre la actual contienda presidencial demócrata y la de 2008, cuando él se impuso contra todo pronóstico a Clinton, quien también partía entonces como favorita.
En otro punto de la entrevista Obama reconoció el precario futuro que enfrentan sus acciones de alivio migratorio para 11 millones de indocumentados, aún si la Suprema Corte de Justicia reafirma su autoridad ejecutiva y deja el camino libre a su implementación.
La semana pasada la Suprema Corte de Justicia aceptó escuchar la apelación interpuesta por la administración Obama sobre el fallo contra la implementación de las acciones ejecutivas, detenidas por un juez federal en Texas. Un fallo a favor revertiendo el de la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito de Nueva Orleans, dejaría al gobierno federal con apenas meses para implementarlas antes que Obama deje la presidencia en enero del 2017.
En este sentido, Obama reconoció que en el corto plazo el futuro de las acciones ejecutivas estará determinado por quien resulte electo presidente.