DAMASCO. El grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó hoy los tres atentados cerca de un santuario chiita en la zona de Ku Sudán, en el suburbio de Sayyida Zeinab, en Damasco, que dejó al menos 45 muertos y más de 110 heridos.

 

En un comunicado difundido en foros yihadistas en internet, la filial del grupo extremista en Damasco, Wilayat Dimashq, informó que “dos soldados del califato llevaron a cabo dos operaciones suicidas contra un nido de los apóstatas politeístas en Sayyida Zeinab, en Damasco”.

 

“Para que sepan los renegados (en alusión a los chiitas) que, igual que ellos combaten, serán combatidos y que no encontrarán seguridad ante los golpes de los mujahidines (guerreros santos) con el permiso de Alá”, agregó la rama del EI.

 

La agencia siria de noticias SANA reportó que tres atentados fueron cometidos, el primero cuando un coche bomba estalló en una parada de autobuses en Ku Sudán, en el suburbio de Sayyida Zeinab, al sur de Damasco y de mayoría chiita.

 

Enseguida, dos kamikazes hicieron explotar los cinturones que llevaban adosados al cuerpo cuando la gente se congrega para ayudar a las víctimas de la primera explosión.

 

El Ministerio sirio del Interior calificó los atentados como “cobardes”. “El objetivo de esta acción terrorista cobarde y desesperada es elevar la moral de los grupos terroristas que están siendo derrotados” por el ejército “en todas las regiones del país”, dijo.

 

Sayyida Zeinab se ubica a unos 17 kilómetros al sur de Damasco y está protegido por el grupo chiita libanés Hezbolá, cuyos líderes han asegurado en varias ocasiones que velan por las áreas y santuarios chiitas de los ataques de los insurgentes sunitas en Siria.

 

En esta zona se encuentra la mezquita chiita del mismo nombre, lugar de peregrinación de los fieles de esta rama del Islam y que en el pasado ya fue objeto de otros ataques.

 

Las explosiones tuvieron lugar en momentos en que un enviado de las Naciones Unidas intentaba iniciar conversaciones de paz indirectas entre delegaciones enviadas a Ginebra por el gobierno sirio y la oposición.

 

El conflicto sirio, que inició el 15 de marzo de 2011 con una protesta contra el régimen de Bashar al Assad y se convirtió en una guerra civil, ha dejado más de 260 mil muertos, al menos un millón de heridos, además cerca de 12 millones de desplazados y refugiados.