Las pérdidas que reflejan las grandes petroleras del mundo como British Petroleum (BP), Exxon, Chevron o Hess en sus últimos resultados trimestrales podría incidir en el desarrollo de la cuarta licitación de la Ronda Uno.
En este proceso se licitarán 10 áreas contractuales para exploración en aguas con más de mil 500 metros de profundidad, pero la tecnología sólo la tienen las grandes empresas del mundo, de las cuales Chevrón, Shell, Total E&P y Hess ya iniciaron su proceso de precalficación.
Entre las empresas que ya reportaron pérdidas durante el cuarto trimestre de 2015 y que participan en la licitación, destaca la petrolera Hess, especializada en perforación de pozos en aguas profundas y que perdió 396 millones de dólares, así como la estadunidense Chevrón, cuyas pérdidas ascendieron a 588 millones de dólares al cierre del año anterior.
Los estados financieros de las petroleras internacionales pondrán presión adicional a la participación internacional en la cuarta licitación, pues tan sólo el año pasado, la inversión en exploración se redujo en 400 mil millones de dólares en el mundo.
“La coyuntura actual hace que el dinero disponible para invertir sea menor y eso hace que los proyectos tengan que ser más competitivos para llamar la atención de los inversionistas”, comentó Alfredo Álvarez, socio líder del sector energético de la consultora Ernst & Young.
Sin embargo, Miriam Grunstein, especialista de la consultora Brilliant Energy, comentó que los contratos establecen plazos de entre cuatro y seis años para que inicien los trabajos que requieren de un mayor gasto, es decir los de perforación.
“Los contratos están diseñados para darle a las petroleras la capacidad de recuperación para entrar a la licitación de aguas profundas. Si hubiera obligación de iniciar la perforación en dos años, la situación sería muy difícil”, comentó.
Además, la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) está obligada a verificar la solvencia de las petroleras interesadas para que puedan participar en los concursos y cumplir con las metas establecidas en caso de que ganen algún contrato, lo que otorga certeza al resultado de la licitación, afirmó.
La llamada “joya de la corona” de la Ronda Uno prevé proyectos por un máximo de 50 mil millones de dólares, en caso de que se coloquen todos los campos y pronostica la extracción de un máximo de 10 millones 900 mil barriles de petróleo crudo equivalente, de acuerdo con Pedro Joaquín Coldwell, titular de la Secretaría de Energía (Sener).
El viernes pasado, el funcionario recordó que la fecha para el cuarto concurso petrolero se dará a conocer a finales de septiembre y tendrá que ser notificada 90 días antes de que se realice, es decir, el resultado final se podría dar a conocer en diciembre de este año.