La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ordenó al Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) que a más tardar el 15 de febrero presente el Plan de Acción para el retiro de los restos de vegetación de los trabajos de deforestación hechos en Tajamar entre el 16 y 20 de enero de 2015. Este es el segundo emplazamiento que la Procuraduría le hace al Fondo, pues el 26 de enero le ordenó la reubicación la fauna que sigue viviendo en el manglar.
Sobre esta orden, la procuraduría explicó que la vegetación que quedó luego de la deforestación es un riesgo de incendio forestal, ya que por la naturaleza de los materiales son combustibles durante la siguiente temporada de calor.
Profepa añadió que el emplazamiento no viola la resolución del Juzgado Segundo de Distrito con sede en Cancún, que dictó la suspensión definitiva de trabajos en lo que dura el juicio de amparo promovido por organizaciones de la sociedad civil, pues el Plan que le pide a Fonatur tiene carácter de recuperación y rehabilitación de la flora de Tajamar.
Esta orden se da tres días antes de que venzan los permisos que tiene Fonatur y el consorcio de constructoras que planean la construcción del desarrollo habitacional Malecón Tajamar en un predio de 58 hectáreas del manglar.
A partir del lunes, si los promotores del desarrollo habitacional quieren continuarlo, tendrán que soltar la ampliación de los permisos ante la Secretaría de Medio Ambiente federal, con la limitante de que la actual Ley General de Vida Silvestre prohíbe cualquier acción que afecte a los manglares; además, tendrán que esperar a que se resuelva el juicio de amparo que en está en proceso.
Y este mismo lunes también vence el plazo para que Fonatur cumpla con el Programa de Rescate y Traslado de Fauna, pues de lo contrario se hará acreedora de una multa de hasta 3.6 millones de pesos.
De acuerdo a la visita que personal de Profepa realizó entre el 26 y 28 de enero pasados, en el manglar hay evidencia de que seguían viviendo 24 especies de aves, cuatro especies de reptiles como la iguana rallada, el basilisco, el cocodrilo de pantano y serpiente ranera Bronceada, además del mapache y tlacuache.
El 3 de febrero, en su cuenta de Twitter, Fonatur aseguró que toda la fauna rescatada se reubicó en la Laguna Nichupté, además de que siguen en plena disposición de trabajar con la procuraduría para proteger a las especies.
Sin embargo, para constatar su cumplimiento, Profepa mandó al Fondo la presentación de un informe detallado de las acciones que le fueron ordenadas, incluyendo las técnicas de captura utilizadas, el manejo de los ejemplares capturados, los registros de los datos sobre estas actividades, así como de las condiciones generales en que se encontraban los ejemplares de fauna y el lugar destino al que fueron reubicados.