Pequeños de 4 o 5 años que venden droga adentro de la cárcel, niños agresivos, violentos, algunos con sobre-estimulación sexual, pues están presentes en las visitas conyugales; conviviendo con secuestradores y homicidas, son algunas de las condiciones que padecen los llamados “niños invisibles”, personas que nacen y crecen tras las rejas sin haber cometido delito alguno y que, además, no están reconocidos por la ley.
Es la situación en la que se encuentran alrededor de 400 niños y niñas en prisiones del país, y sólo es una estimación debido a que no se cuentan los niños que están en las cárceles con “autogobierno” (aproximadamente 75% de las prisiones del país), donde ha sido imposible hacer un censo de la maternidad en prisión, por ello resulta indispensable y urgente atender a ese grupo vulnerable, y destinar los recursos y áreas especiales para su desarrollo, exhortó Saskia Niño de Rivera, presidenta de la fundación Reinserta un Mexicano, enfocada a temas de prevención y reinserción social.
En entrevista con 24 HORAS, la activista exhortó a autoridades, organizaciones civiles, y sociedad en general a voltear la mirada y atender la problemática de la maternidad en reclusión a través de políticas públicas y recursos para mejorar las condiciones en las que viven cientos de madres junto con sus hijos privados de la libertad; adelantó que la organización que encabeza prepara un investigación pionera en la materia que buscará identificar los principales indicadores de ese fenómeno y contribuir para dar una respuesta concreta sobre la situación.
“Son niños que están atrás de las rejas, viviendo con sus mamás y desafortunamente no existe una ley, una política pública que los involucre, son niños que viven de donaciones porque no son parte del presupuesto penitenciario, y no están reconocidos en la Ley General de la Niñez y la Adolescencia como un grupo vulnerable”, afirmó Niño de Rivera.
A nivel nacional, refirió Saskia, las condiciones en las que se encuentran estos menores difieren debido a que en algunos casos los mantienen en prisión desde que nacen hasta los seis años, en otros centros se quedan sólo hasta los tres años, y reconoció que han detectado casos de niños de 12 y 13 años que siguen viviendo en la cárcel.
Dicha situación, aunado al hecho de que conviven en población general, carecen de educación y recursos, puede derivar en que los pequeños generen conductas antisociales que los encamine a la red criminógena de la que probablemente provienen sus padres, advirtió.
“Reinserta aboga por esos niños, no sólo legislativamente porque ya hemos logrado que se presentara una ley y estamos esperando que en este período sí pueda pasar, y votarse a favor para que estos niños sean parte de Ley General de la Niñez, y empezar a pelear para que haya dignificación carcelaria para ellos, tiene que haber una área especial para maternidad adentro de prisión, no puedes tener a los niños durmiendo en las celdas, no los puedes tener con la población general.Tiene que destinarse una estancia donde estos niños puedan tener el mejor desarrollo, educación, y poder estar cerca de sus mamás pero cuidando su integridad y bienestar”.
¿Cuántos hay?
De acuerdo con la organización, la Comisión Nacional de Derechos Humanos ha determinado que a la fecha hay 376 niños en las cárceles del país pero el hecho de que actualmente haya 17 embarazadas en el reclusorio de Santa Martha Acatitla, y en muchos penales más el autogobierno impide entrar para conocer la situación, resulta difícil ubicar los casos en total y las condiciones en las que se encuentran esos infantes.
Información de la Subsecretaría del Sistema Penitenciario de la Ciudad de México proporcionada a este diario indica que en el reclusorio femenil de Santa Martha hay un total de 136 menores, incluyendo 48 niñas, 54 niños y 34 bebés, de los cuales sólo 105 están inscritos en el Centro de Desarrollo Infantil (Cendi). Las edades de los menores que viven en la penitenciaria va desde la etapa de lactantes 1, que oscila entre los 45 días a 6 meses de nacidos, hasta la etapa de preescolar 3, que son niños de los 5 a 6 años.
Niño de Rivera señaló que luego de tres años de que Reinserta empezó a trabajar en tres principales áreas: Adolescentes en conflicto con la ley y su proceso de reinserción, Causas Justas, avocada a orientar y defender a gente inocente en prisión; y México Invisible, sobre los niños que nacen y viven en prisión, a finales de 2015 la organización empezó a incidir en el estado de México, así como en el Centro Federal de Readaptación Social Número 16, Femenil Morelos, que es el único penal hecho y destinado para mujeres en el país.
La activista indicó que en el Cefereso de Morelos hay apenas cuatro niños, pues antes las mujeres que estaban recluidas en los complejos penitenciarios de Nayarit e Islas Marías, fueron trasladadas a ese centro a partir del 31 de diciembre del año pasado 2015. El Cefereso cuenta con un cupo de 2 mil 500 internas, y tiene una área destinada para los menores capaz de albergar a 254 niños.
“El CPS Femenil Morelos es el único centro que tiene un modelo que Reinserta apoya, sus instalaciones son perfectas e ideales para el bienestar del niño, y el vínculo afectivo materno infantil; Santa Martha también es un modelo con espacios dignos, el subsecretario Hazael Ruíz ha trabajado de la mano con nosotros, nos abrieron las puertas para dejarnos dignificar mucho el espacio, sin embargo, por la falta de recursos se está fallando en que los niños siguen conviviendo en población general, y no se ha podido empezar a delimitar un espacio específico para que los niños puedan estar con sus mamás pero en ambiente más sano y agradable para los niños”.
La propuesta que Reinserta tiene para la conformación de esos espacios destinados a la maternidad es que en lugar de que los niños se vayan a casas hogares o con familiares que de alguna manera tienen relación con conductas antisociales, puedan mejor vivir alejados de esos vínculos que los orillen a un ambiente criminógeno.
Saskia reiteró que la fundación que dirige no tiene fines de lucro y se mantiene con donativos al 100%, y bajo ese esquema es que a partir de este mes arrancarán en conjunto con el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), la Subsecretaría de Prevención y Participación Ciudadana, y con la Comisión Nacional de Seguridad, la realización de un proyecto de investigación a nivel nacional sobre la maternidad en prisión.
¿Qué hacer?
“Definitivamente impulsar políticas públicas, incluir a estos niños en la ley, empezar a bajarles recursos y monitorear el bienestar de esos niños, eso es a corto plazo, y a mediano es la construcción de alianzas con gobierno y sociedad civil para construir espacios dignos que estén cerca de los reclusorios o como anexos de los mismo pero destinados especialmente para la maternidad en prisión. Mucha gente no sabe que existe esta realidad, se habla de género y mujeres en prisión pero no de qué hacemos con esos niños”.
Otro de los aspectos para tratar ese fenómeno a partir del ámbito jurídico, consideró De Rivera, resulta el que las mujeres primo delincuentes o que no haya cometido delitos graves se les aplique una cuestión de pena privativa dentro de su casa, debido a lo que culturalmente implica en México la figura materna en el desarrollo de los niños, y los daños que genera su ausencia.
“Hoy en día está en nuestra ley la alternativa a la pena, y aquí es cuestión de que lo apliquen los jueces, si tiene una mujer que se robó un bolillo y un refresco, es primo delincuente, ¿Para qué la metes 12 años a la cárcel si tiene cuatro hijos, son cuatro niños que se quedarán sin un sustento, abandonados y va a ser garrafal para ellos, mejor haz una cuestión, por ejemplo, de arresto domiciliario para esa mujer”.
Menores en Santa Martha:
48 niñas
54 niños
34 bebés
Total 136
98 mamás
Inscritos en el Cendi
39 niñas
41 niños
Bebés:
11 niñas
14 niños
Total: 105
Edades
Lactantes 1. 45 días a 6 meses
Lactantes 2. 7 meses a 11 meses
Lactante 3. 12 meses a 18 meses
Maternal 1 1 año 7 meses a 1 año 11 meses
Maternal 2. 2 años 1 meses a 2 años 6 meses
Maternal 3. 2 años 7 meses a 3 años
Preescolar 1. 3 a 4 años
Preescolar 2. 4 a 5 años
Preescolar 3. 5 a 6 años