Ante el aluvión de críticas hacia los juguetes que promueven estereotipos, la hipersexualización de las muñecas para niñas y la caída de hasta 20% en las ventas anuales de la muñeca “Barbie” de Mattel, uno de los principales exponentes de los juguetes diseñados para niñas, las marcas han comenzado a comprender el mensaje: la diversidad también vende.
Cuando en 1959 la empresa Mattel presentó su primera muñeca de este tipo (basada en la alemana Bild Lilli), “Barbie” era el modelo de la mujer ideal en la etapa de la posguerra: curvilínea, femenina, encantadora, no tenía profesión pero vestía con elegancia: era “perfecta”.
A pesar de que el año pasado Barbie llegó a generar mil millones de dólares en ventas anuales para Mattel Inc., la muñeca no se ha podido recuperar de una crisis desde 2008 -poco antes del 50 aniversario de su lanzamiento- y llevó a la empresa estadunidense a pensar en “jubilarla”.
Se necesitaban medidas urgentes porque a las niñas ya no les estaban gustando las muñecas y cada vez preferían más los juguetes electrónicos, las tabletas y juguetes basados en películas populares, de acuerdo con un reporte de 2015.
Así, el 28 de enero Mattel presentó una línea de muñecas con diversas tonalidades de piel, tres nuevas formas corporales (baja de estatura, curvilínea y muy alta) como parte de su proyecto “Amanecer”. También sacó a la venta su primera muñeca inspirada en una mujer exitosa y lesbiana: la futbolista estadunidense Abby Wambach.
La insatisfacción de las pequeñas consumidoras no afecta solamente a “Barbie”: en 2014, una niña británica de siete años llamada Charlotte Benjamin le escribió una carta a Lego quejándose por la falta de personajes femeninos y pidiendo a la empresa danesa que les permitiera a los ya existentes trabajar y hacer cosas “más divertidas” pues en esos momentos, sólo presentaban a las mujeres yendo de compras y quedándose en casa.
Meses después, la empresa respondió creando un set de mujeres científicas. La co-protagonista de su primera película “La gran aventura Lego” de 2014 es una muñeca constructora ruda y con súper poderes.
En la primavera de este año, Mattel lanzará una nueva línea de muñecas basadas en los personajes femeninos de DC Comics: la Mujer Maravilla, Batichica y Súper Chica, entre otras. Estos juguetes diseñados por mujeres para niñas de seis años no usan ropa entallada ni escotada; en las fotografías que dio a conocer la empresa en octubre pasado lucen tiernas pero fuertes y están equipadas con accesorios y herramientas, en lugar de bolsos, vestidos y zapatos… igual que sus coprotagonistas varones.
Cifras
- 20% cayeron las ventas de “Barbie” entre 2012 y 2014
- 3.00% bajaron las acciones de Mattel a principios de 2015