El jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera entregó al papa Francisco la Llave de la Ciudad, el pergamino y la medalla que lo reconocen como Huésped Distinguido.
Este acto, que duró apenas dos minutos, se realizó en un templete instalado frente a la Catedral Metropolitana, donde tambien se colocaron las banderas de México y El Vaticano.
El papa Francisco entró a la Catedral Metropolitana donde sostiene un encuentro con los obispos de México.
Se prevé que al mediodía regrese a la Nunciatura en el papamóvil.
Durante la tarde de este sábado comenzará un recorrido a la Basílica de Guadalupe.
Papa recorre el Zócalo
Durante su recorrido por los pasillos creados con vallas en la plancha del Zócalo, el Papa besó a dos niños y recibió un sombrero que una persona le regaló.
También bendijo a las personas que aguardan detrás de las rejas colocadas en el lugar.
Al paso la gente del papamóvil la gente corre para sacarle fotos y saludarlo.
Reparten sandwich y café a feligreses
Desde las primeras horas de este sábado, los espacios divididos por vallas en la Plaza de la Constitución y las gradas instaladas sobre el circuito que la rodea poco a poco comenzaron a ocuparse por las personas que presenciarán las actividades que llevará a cabo el Papa Francisco en el Centro Histórico de la Ciudad.
Elementos del Gobierno de la Ciudad de México reparten desayunos, agua y café sobre la calle 5 de mayo a quienes llegan a la plaza.
Para poder ingresar, en los accesos a las zonas divididas se solicita a los asistentes los boletos, sin embargo hay espacios destinados para un aforo aproximado de 40 mil personas que no cuentan con un boleto. (Con información de Notimex)