CARACAS. Nicolás Maduro anunció una devaluación del 63% de la moneda nacional al pasar el valor del dólar preferencial o protegido de 6.3 a 10 bolívares, al tiempo que una “simplificación” del sistema de control cambiario, que pasa de tres “a dos bandas”.
El nuevo sistema cambiario suprime uno de los tres tipos de cambio que existían hasta ahora (el intermedio SICAD, que se encontraba a 13 bolívares) e incorpora un tipo de cambio del “dólar flotante”, según el presidente, que no precisó más detalles sobre el tipo de cotización al que arrancará mañana.
Ese tipo de cambio se basará en una “transformación” del actual SIMADI, la cotización oficial más alta, que actualmente se encuentra en cerca de 200 bolívares por dólar.
Maduro informó además del aumento del 20% en los salarios de los “trabajadores y trabajadoras del país”. Así como cambios tributarios que en sus palabras “será una revolución contra la evasión y en contra del fraude fiscal”. Y adelantó que implementará un sistema de facturación electrónica que “en el Ecuador ha dado resultados extraordinarios”.
Dentro del paquete de medidas, Maduro también comunicó de un aumento del precio de los combustibles, por primera vez en dos décadas, de 0.01 dólares a 0.95 dólares el litro de la gasolina súper.
“Esto es una medida necesaria, una acción necesaria, yo la asumo (…) 1 bolívar (0.15 dólares) la de 91 octanos y 6 bolívares (0.95) la de 95”, afirmó el presidente en cadena de radio y televisión, como parte de una serie de acciones para enfrentar la grave crisis económica.
La subida de la gasolina es una medida que se ha manejado siempre con especial precaución y cuidado en Venezuela después de que un alza del carburante, entre otras medidas, provocara el estallido social de 1989 contra el gobierno de Carlos Andrés Pérez, conocido como el “Caracazo”.