WASHINGTON. El Índice de Precios al Consumo (IPC) de Estados Unidos se mantuvo estable en enero, con lo que la inflación acumulada en los últimos 12 meses quedó en el 1.4%, informó hoy el Departamento de Trabajo.

 

El dato de enero fue mejor de lo esperado por los analistas, que preveían un descenso del 0.1%, igual al de diciembre.

 

En el primer mes del año, los precios de los alimentos no registraron cambios, mientras que los de la energía cayeron un 2.8%, de nuevo arrastrados por la gasolina, que se abarató en enero un 4.8%, de acuerdo con el informe.

 

Sin tener en cuenta los precios de los alimentos y la energía, que son los más volátiles, la inflación subyacente aumentó en enero un 0.3%, su mayor incremento desde agosto de 2011, y la interanual se situó en un 2.2%.

 

La inflación en Estados Unidos cerró 2015 en el 0.7%, el segundo nivel más bajo en los últimos 50 años y todavía bastante alejado de la meta del 2% fijada por la Reserva Federal (Fed).

 

El dato del 0.7% de inflación acumulada en todo 2015 fue levemente inferior al del 0.8% de 2014 y marcó el incremento anual más débil desde el 0.1% registrado en 2008.

 

La persistencia de una baja inflación durante los últimos dos años en EU se explica en parte por el descenso global de los precios de la energía.

 

Pese a que la inflación no está en los niveles deseados por la Fed, el banco central de EU decidió a mediados de diciembre pasado elevar los tipos de interés en el país por primera vez desde 2006.  DM