El presidente estadunidense, Barack Obama aseguró que reafirmará su política de defensa de los derechos humanos ante su par cubano Raúl Castro, cuando ambos se reunan en La Habana, en su histórica visita a Cuba de marzo próximo.

 

Obama tendrá además oportunidad de transmitir este mensaje a los cubanos en el discurso que se espera pronuncie en el país caribeño, además de las reuniones que sostendrá con miembros de la sociedad civil y empresarios de ese país.

 

“Mi visita será una oportunidad para seguir adelante”, dijo el mandatario en su mensaje semanal, está vez a propósito del viaje a Cuba programado para los días 21 y 22 de marzo próximos, la primera visita de un presidente estadunidense a la isla en casi 90 años.

 

Obama adelantó que con Castro disertará “sobre cómo podemos continuar normalizando las relaciones (bilaterales), sobre cómo podemos facilitar el comercio y cómo podemos facilitar a los cubanos el acceso a internet y la creación de sus propios negocios”.

 

“Al igual que cuando me reuní con el presidente Castro el año pasado, hablaré con franqueza sobre nuestras diferencias importantes con el gobierno cubano, como en la democracia y en los derechos humanos”, detalló.

 

El presidente estadunidense subrayó que también reafirmará su determinación de continuar en la defensa de valores universales “como la libertad de expresión, de reunión y de religión”.

 

Obama sostendrá un encuentro con miembros de la disidencia cubana, “hombres y mujeres valientes que dan una voz a las aspiraciones del pueblo cubano”.

 

“Me reuniré con emprendedores cubanos para aprender cómo podemos ayudarles a iniciar nuevas empresas, y le hablaré directamente al pueblo cubano sobre los valores que compartimos y cómo creo que podemos colaborar a medida que trabajen por el futuro que desean”, destacó.

 

Afirmó que está consciente de que la transformación en la relación entre ambos países tomará tiempo y confió que su visita ayudará a avanzar en la agenda en torno a la normalización de las relaciones bilaterales.

 

“Siempre he dicho que el cambio no vendrá a Cuba de la noche a la mañana. Pero a medida que Cuba se abra, significará más oportunidades y recursos para los cubanos de a pie. Y estamos viendo progreso”, enfatizó.