El pequeño afgano que el pasado enero encandiló a los usuarios de las redes sociales con una camiseta de Leo Messi hecha con una bolsa de plástico recibió hoy el dorsal oficial de su ídolo firmado por el futbolista argentino.
“¡Murtaza vio hoy cumplido uno de sus mayores sueños! Ha recibido camisetas del equipo y un balón firmado con un mensaje personal” de Messi, indicó en un comunicado Unicef, el organismo de Naciones Unidas para la infancia del que el futbolista es embajador de buena voluntad.
Imágenes del niño ataviado con una bolsa plástica de rayas verticales azules y blancas con el nombre de Messi y el número 10 escrito a bolígrafo, emulando el dorsal de su ídolo en la selección argentina, dieron la vuelta al mundo el pasado enero.
“Amo a Messi y mi camiseta dice que Messi me ama”, afirmó Murtaza tras recibir el regalo de su ídolo, según la nota de Unicef.
Aunque el pequeño, de 5 años, se puso “muy contento” al recibir los dos dorsales y el balón, se quedó algo decepcionado al ver que su ídolo no estaba presente para entregárselos, explicó a Efe su padre, Arif Ahmadi.
“Murtaza creía que hoy conocería a Messi, pero desde que se dio cuenta de que solo le habían enviado camisetas y un balón, está triste y pidiendo conocer a Messi personalmente“, aseveró.
Según el padre del pequeño, hace cerca de un mes toda la familia se mudó a Kabul desde su remota aldea de la provincia de Ghazni (sureste) para que Murtaza pudiese cumplir su sueño de encontrarse con el argentino, aunque el encuentro todavía no ha tenido lugar.
“Unicef nos dijo que esperáramos para el encuentro de Mustaza con Messi, pero aún no sabemos cuando se conocerán”, apuntó Ahmadi.
La Federación Afgana de Futbol (AFF) confirmó a finales de enero que estaba tratando de cerrar una cita con el jugador argentino del F.C. Barcelona.
Antes de que sus fotos diesen la vuelta al mundo, el muchacho de la minoría étnica hazara (de origen mongol) llevaba tiempo pidiendo a su familia una camiseta del argentino, pero en su remoto lugar de residencia no es posible conseguirla.
Finalmente, un día encontró una bolsa de plástico y se la llevó a sus hermanos para que le hiciesen una camiseta de Messi, según explicaba a Efe su progenitor el mes pasado, en pleno estallido de furor mediático y en las redes sociales por las fotos del niño.
El chico se pasa el día jugando al futbol con un balón de voleibol y las botas altas de su padre, ya que su familia no se puede permitir la equipación adecuada.
También sigue los partidos de su ídolo los días soleados, gracias al panel solar que Ahmadi instaló con una batería de coche para hacer funcionar la televisión en una aldea sin corriente eléctrica.