La Secretaría de Gobernación informó sobre la detención de Rubén Pérez Andrade, elemento en activo de la Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz, por su presunta participación en la desaparición de cinco jóvenes en el municipio de Tierra Blanca, ocurrida el 11 de enero pasado.
Familiares de las víctimas sostuvieron una reunión con autoridades federales, estatales y con el subsecretario de derechos humanos de la Secretaría de Gobernación, Roberto Campa Cifrián, en la que se confirmó la consignación del policía estatal ante el Juez de Primera Instancia por el delito de desaparición forzada y conocieron los avances de la investigación.
El funcionario detalló que para la detención de Pérez Andrade las autoridades federales reunieron las pruebas suficientes para obtener la orden de arresto; ya son ocho los detenidos por este caso”.
“Esta detención es un elemento adicional en la investigación, de la cual se desprenden nuevas líneas de investigación, las cuales serán agotadas en su totalidad”, informó Gobernación mediante un comunicado de prensa.
Otro de los puntos que presentó el subsecretario a los familiares fue la ampliación del radio de búsqueda de indicios en el rancho del municipio de Tlalixcoyan, donde hace una semanas la Policía Federal encontró restos humanos que corresponden a dos de los desaparecidos.
Con dicha acción, personal de la Gendarmería, peritos en materia forense y criminalística, de la División Científica de la Policía Federal, mantendrán su trabajo para hallar más evidencia que permita localizar a los desaparecidos.
Este caso comenzó el 11 de enero, cuando José Benítez, Mario Orozco, Alfredo González, Bernardo Benítez y Susana Tapia fueron secuestrados por policías estatales de Veracruz en el municipio de Tierra Blanca.
Tras la desaparición, las autoridades federales comenzaron la búsqueda y hasta el momento se conoce que en un rancho del municipio Tlalixcoyan (vecino a Tierra Blanca) se encontraron restos humanos. Después de realizar estudios se identificaron a dos de los desaparecidos.
Pese a estos resultados, los familiares solicitaron nuevos exámenes, además de que ya tuvieron una reunión con representantes de la ONU.
Entrevistado vía telefónica para Radio Fórmula, Bernardo Benítez, padre de los jóvenes, expresó el desgaste en el que se encuentran, pues el no conocer la situación de sus hijos ha perjudicado todos los ámbitos de su vida. Sobre el plantón que mantienen en el ministerio Público de Tierra Blanca, aseguró que al lugar han acudido decenas de personas quienes aseguran tener familiares desaparecidos.
Por ley. Los familiares de los jóvenes desaparecidos tienen derecho a saber y conocer los avances de las investigaciones respecto a sus familiares siniestrados; así como a la justicia y la reparación del daño.