La jueza Gloria Esther Hernández Valtierra le dictó prisión preventiva el domingo al ex alcalde priísta de Silao, Enrique Solís Arzola, acusado de ser el autor intelectual de la agresión a la periodista Karla Janeth Silva, reportera de El Heraldo de León, ocurrida hace dos años. Ello porque no le gustó
Entrevistada por Paola Rojas en Radio Fórmula, la reportera se dijo tranquila y confiada que habrá “buenos resultados”, sin embargo reconoció que pese a la detención realiza su trabajo con adecuaciones y sigue con vigilancia estatal. He estado “un poquito más imitada, pero yo sigo”.
He tratado de “ser muy cautelosa en mi seguridad. Continúo con protección con vigilancia por parte de las fuerzas de seguridad”, señaló.
Silva Guerrero admitió que ha sido complejo continuar con su vida. Agregó que “es una situación difícil de lidiar. Siempre estoy buscando la manera de acomodar mis entrevistas y reuniones, porque es bastante complejo”, al responder sobre si teme represalias.
“Este no es un trabajo no nada más por mí, sino por todo el gremio. Lo he manifestado en repetidas ocasiones, va siendo momento en México de poner un alto. De demostrarle a la autoridad, al Estado que no puede ejercer recursos públicos, que no puede emplear el poder que tiene para dañar a la sociedad”, añadió.
El ex edil, detenido la víspera, permanecerá recluido en el penal de Irapuato, durante los dos meses que se estima dure el proceso para dictarle sentencia, en el nuevo sistema de justicia penal.
Al filo de la medianoche, la jueza ordenó la vinculación de proceso durante una audiencia que duró más de 15 horas con cuatro recesos.
A Solís Arzola se le acusa de los delitos de agresiones, robo calificado y amenazas de muerte, pese a que sus abogados presentaron un amparo que les fue negado.
La defensa legal del ex alcalde trató de acusar sólo al ex director de la policía municipal, Nicasio Aguirre, de ser el responsable de los delitos inculpados.
El 4 de septiembre de 2014, Karla Silva fue agredida en la redacción del periódico donde labora por Luis Gerardo Hernández, Joaquín Osvaldo Valero Garnica y José Samuel Ornelas Martínez, quienes presuntamente recibieron órdenes de Aguirre.