LA HANABA. Los Rays de Tampa derrotó 4-1 a la Selección Nacional de Cuba en el partido amistoso que se llevó a cabo en el Estado Latinoamericano en La Habana.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, asistió al partido junto a su homólogo Raúl Castro.
Obama llegó, sin chaqueta y con camisa blanca, con su esposa Michelle Obama y sus hijas Malia y Sasha, y acompañado por su homólogo cubano Raúl Castro, a un coliseo repleto que lo saludó con una ovación.
Antes de comenzar el partido, en el estadio se guardó un minuto silencio por los atentados terroristas ocurridos hoy en Bruselas (Bélgica).
Esta mañana en su discurso al pueblo cubano, Obama urgió a la comunidad internacional a permanecer “unida” ante el terrorismo, al condenar los atentados en Bélgica y prometer que su país hará “lo necesario” para llevar ante la justicia a los responsables.
Su asistencia a este simbólico partido de béisbol entre un equipo cubano y otro estadounidense será el último acto del presidente de Estados Unidos en Cuba, ya que esta tarde partirá hacia Argentina.