La Policía federal belga lanzó una orden de búsqueda y captura contra este individuo, que en las imágenes aparecía vestido con una chaqueta blanca y un gorro negro.
Fuentes no oficiales apuntaron a que el sospechoso podría ser uno de los cómplices de Salah Abdeslam, arrestado el pasado viernes tras cuatro meses de intensa búsqueda por su vinculación con los atentados del 13-N en París.
En concreto, podría tratarse de Najim Laachraoui, quien según algunos medios sería responsable de la confección de los cinturones explosivos utilizados en los ataques de la capital francesa.
“Es todavía demasiado pronto para establecer un vínculo formal con los atentados de París”, se limitó a decir en rueda de prensa el fiscal federal de Bélgica, Frédéric Van Leeuw.
Las primeras dos explosiones se produjeron con un intervalo de varios segundos en el aeropuerto de Zaventem, cercano a Bruselas, hacia las 07.00 GMT en la zona de mostradores de facturación de Brussels Airlines y American Airlines, confirmó el gobernador de la provincia de Brabante flamenco, Lodewijk De Witte.