BRUSELAS. El transporte público de Bruselas se reanudó hoy de forma progresiva y sólo parcialmente, con una gran presencia de militares y policías, pero el aeropuerto sigue sin ninguna actividad, al menos hasta el viernes.

 

El aeropuerto de Bruselas-Zaventem, en un mensaje en su cuenta Twitter, anunció que volverá a estar cerrado mañana, jueves, y que durante el día de hoy informará de su reapertura.

 

La Sociedad Nacional de Ferrocarriles Belgas (SNCB) señaló que las tres principales estaciones de Bruselas (Midi, Central y Nord) estaban abiertas, pero con un acceso limitado y con controles, y lo mismo ocurría con las de Luxembourg y la de Lovaina.

 

Siguen cerradas tanto la del aeropuerto, como las de Congrès, Chapelle, Mérode, Delt y Schuman, esta última a pocos cientos de metros de la estación del metro de Malbeek donde se produjo uno de los atentados.

 

Precisamente, las dos líneas de metro que pasan por esa estación, la 1 y la 5, tienen interrumpido una parte de su trazado, en las proximidades de donde se produjo la explosión que causó la muerte a una veintenas de personas. Esos tramos fueron sustituidos por autobuses.

 

Ninguna persona puede entrar en el metro sin pasar por controles de seguridad y la revisión de sus pertenencias, como bolsos y ordenadores, según ha podido constatar Efe.

 

La presencia de militares y policías es también visible en la Estación Central, donde se controla a pasajeros y transeúntes.

 

La sociedad del transporte metropolitano de Bruselas (STIB) precisó en un comunicado que el acceso a las estaciones subterráneas que habían sido abiertas iba a estar limitado de las 6.00 GMT a las 18.00 GMT y con controles en la entrada.

 

Tampoco están en servicio las líneas 2 y 6, con autobuses de sustitución.

 

En el resto, sólo unas pocas estaciones permiten la llegada de viajeros. Todas las líneas de los tranvías funcionaban, salvo la 81

 

Según organismo de gestión del tráfico aéreo en Bélgica (Belgocontrol), un total de 32 vuelos que debían haber aterrizado ayer en Bruselas fueron desviados a otros aeropuertos, de los cuales 13 tomaron finalmente tierra en Lieja, ocho en Ostende, siete en Charleroi, dos en Amberes, uno en Lille (norte de Francia) y otro en Beek (Holanda).

 

Belgocontrol indicó que no se había tomado ninguna decisión sobre cuándo se restablecería la actividad en el aeropuerto de la capital belga. Las autoridades dijeron el martes que eso no ocurriría al menos hasta el jueves.

 

La dirección del aeropuerto informó hoy en la red social Twitter que en cuanto tengan acceso a la terminal afectada por las explosiones, “podremos analizar los daños” y anunciar a lo largo del día “cuándo se retomarán las operaciones”.