BRUSELAS. Uno de los terroristas suicidas del aeropuerto internacional de Bruselas, identificado como Ibrahim El Bakraui, dejó un testamento en el que reconoce haber “precipitado” su acción por sentirse inseguro, informó hoy aquí el fiscal federal belga, Frédéric Van Leeuw.
Las autoridades belgas encontraron en los registros efectuados el martes en el distrito bruselense de Schaerbeek 15 kilos de explosivos TATP y el testamento de Brahim, uno de los atacantes suicidas del aeropuerto internacional de Zaventem, cercano a Bruselas.
Según el fiscal, El Bakraoui escribió que estaba “en apuros, sin saber qué hacer, siendo buscado por todas partes”.
“Ya no se sentía seguro en ninguna parte y aseguraba que si se prolongaba (la situación) se arriesgaba a terminar (…) en una celda”, agregó el fiscal.
[Live] Belgian crisis centre director: New crisis centre opened in for those affected by #Brussels attack https://t.co/oaKy3WZgdk
— euronews (@euronews) 23 de marzo de 2016
El testamento estaba en la papelera de una computadora hallada en la calle Max Roos, en donde también se efectuaron este martes registros, gracias a las informaciones del taxista que había trasladado la mañana de ayer desde allí a Brahim y a otros dos hombres hasta el aeropuerto internacional de Zaventem, donde cometieron el atentado.
La información indica una probable relación entre los atentados y las operaciones policíacas de la pasada semana, que llevaron a la detención de Salah Abdeslam, único terrorista superviviente de los atentados de París, y en la muerte de uno de sus cómplices.
En los registros, las fuerzas del orden se incautaron de 15 kilos de explosivos tipo TATP, 50 litros de acetona, 30 litros de agua oxigenada, detonadores, una maleta cargada de tornillos y tuercas y material para confeccionar artefactos, incluido ventiladores, informó el fiscal federal, Frédéric Van Leeuw, en conferencia de prensa.
Otros dos registros se realizaron en la misma calle y no dieron resultados, según el fiscal.
Van Leeuw confirmó que los explosivos empleados en el aeropuerto de Zaventem se encontraban en las maletas de los tres terroristas que aparecen en las imágenes difundidas ayer por los medios belgas. Los hombres depositaron sus maletas y la carga de dos de ellas explotó.
La tercera bomba, que contenía la mayor carga explosiva, estalló mucho más tarde, cuando las fuerzas del orden se alistaban a inspeccionar la maleta.
Su propietario, identificado como Najim Laachraoui, un conocido terrorista experto en explosivos, habría abandonado el local y es objeto de una intensa búsqueda, confirmó Van Leeuw.
La cifra de víctimas se actualizó a 31 muertos y 260 heridos, reveló hoy la ministra de Sanidad, Maggie De Block.