Aunque las marchas generan congestionamiento vehicular, lo que origina los contaminantes es el parque vehicular, principalmente el que proviene de los autos particulares, por lo que las políticas públicas se orientan a regular la circulación de los autos y no las manifestaciones, señaló Tanya Müller, titular de la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México.

 

Durante el Taller sobre Calidad del Aire CDMX 2016, la funcionaria explicó que con las marchas es claro un problema de congestionamiento, pero para decir con toda contundencia que generan contaminación se tendrían que llevar los sensores remotos y medirlos en ese momento.

 

“Cuando hay una marcha, las personas que se movilizan o que utilizan el auto particular ya salieron de su casa, entonces ese es el origen. Qué es lo que sí sucede en otros países cuando hay un congestionamiento, y eso es una práctica ciudadana, es que se apaga el automóvil”, mencionó.

 

La secretaria explicó que para resolver el problema de fondo, las políticas se orientan hacia el transporte público.

 

“La tasa de motorización está creciendo, en medida de que hay una mayor tasa de motorización en las entidades también hay un crecimiento de la tendencia de las emisiones contaminante que va ligado directamente a lo que es el transporte público, por eso la ciudad de México tiene 15 kilómetros de Metrobús y se continúa priorizando las políticas públicas para transporte público que atenderán la problemática”, dijo.

 

Adelantó que la dependencia a su carga se encuentra en una etapa de análisis sobre la tarificación por la congestión del tráfico, que consiste en cobros por externalidades negativas generadas por la cantidad de vehículos, así como las ecozonas, en las que se restringe completamente la entrada de autos.