BRUSELAS. El secretario de Economía de México, Ildefonso Guajardo, expresó que confía que la crisis por la sobreproducción de acero “ha tocado fondo”, pero aseguró que el gobierno “no bajará la guardia”.

 

“Las cifras de marzo parecen reflejar que hemos tocado fondo y que a partir de ahora la situación empezará a mejorar”, observó el funcionario, de visita en Bruselas, en entrevista con la prensa mexicana.

 

Sin embargo, admitió que “no se puede eliminar el riesgo“ de un eventual cierre de plantas, como viene ocurriendo en Estados Unidos y Europa.

 

Guajardo participó en Bruselas, en una reunión de alto nivel auspiciada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) para discutir posibles soluciones a la crisis global de la siderurgia.

 

México es el segundo productor de acero en América Latina, después de Brasil, pero las siderúrgicas locales han perdido 25 por ciento del mercado nacional en los últimos cinco años.

 

Hasta 2010, el 50 por ciento de la demanda nacional de acero era atendida por la industria mexicana, cifra que se redujo a 25 por ciento, con el otro 75 por ciento importado principalmente de China.

 

El país asiático es acusado por los demás productores mundiales de subsidiar sus exportaciones y haber inflado su capacidad de producción.

 

Entre 2010 y 2015, las importaciones de acero desde Asia doblaron de volumen en México, mientras que las desde Estados Unidos cayeron por la mitad.

 

Según Guajardo, “casi todo” el crecimiento del excedente de producción mexicana fue captado por las exportaciones, lo que impactó sobre la industria local, a pesar de la imposición de aranceles de 15 por ciento sobre las importaciones de algunos tipos de acero.

 

“Los precios habían caído tanto que las industrias, que son los mayores interesados en tener precios bajos, dijeron que podíamos seguir adelante (con los nuevos aranceles) porque, aun así, continuarían pagando menos de lo que habían proyectado”, recordó.

 

México tiene un techo de 30 por ciento en los aranceles que puede imponer sobre las importaciones de acero desde los países con los cuales no mantiene tratados comerciales.

 

“No creo que la línea a seguir sea subir más los aranceles. Hay una posibilidad de ampliar el espectro (de productos afectados por la imposición), pero no el valor. Estamos en proceso de consulta“, dijo.

 

El gobierno tiene previsto concertar con Estados Unidos y Canadá cualquier nueva acción para proteger a sus respectivas industrias.

 

“Como estamos muy integrados, tenemos que estar conscientes de las consecuencias que nuestras decisiones pueden tener sobre nuestros socios, inclusive sobre otros países de Asia que pueden ser afectados por nuestros aranceles, como Corea del Sur“, señaló Guajardo.

 

De todas formar, el secretario consideró un “paso positivo“ que China haya participado de la reunión de hoy.