A pesar de que la cantidad de denuncias por tortura aumentó en los primeros dos años de esta administración, el número de Recomendaciones de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) se redujo.
La Procuraduría General de la República (PGR) recibió, en los primeros dos años de esta administración, 3 mil 568 denuncias, en cambio, entre 2006 y 2012 se iniciaron 487 denuncias, informó la PGR vía solicitud de información.
En tanto, la Procuraduría General de Justicia Militar inició 229 indagatorias por probables actos de tortura, entre enero de 2007 y junio de 2014, y destaca que en el año 2013 recibió la mayor cantidad de denuncias, con 56, de acuerdo con la información obtenida por transparencia.
Por otra parte, la CNDH emitió 120 Recomendaciones al Ejército, entre el año 2007 y 2016; del total 113 corresponden a la administración anterior y siete a la actual; estas fueron elaboradas al comprobar que los soldados cometieron delitos de tortura, homicidio, golpes, detención injustificada, cateo sin orden judicial, privación ilegal de la libertad y abuso sexual, entre otros. Todas las Recomendaciones fueron aceptadas por la Secretaría de la Defensa Nacional.
El relator de la ONU sobre tortura, Juan Méndez, y Amnistía Internacional (AI) advirtieron el año pasado que la tortura en México es generalizada y que ha alcanzado niveles catastróficos por recurrentes casos de asfixia, violaciones, abuso sexual, choques eléctricos y golpes en contra de personas detenidas.
El 14 de diciembre de 2015, en el marco del Día Internacional de los Derechos Humanos, el secretario de la Defensa, Salvador Cienfuegos Zepeda, destacó las acciones que se han realizado en esta administración en materia de derechos humanos e igualdad de género, resultados que, aseguró, se reflejan en la disminución de quejas y Recomendaciones de la CNDH.
Entre las tareas que realiza el Ejército sobresalen las academias, talleres, diplomados y cursos para los militares, en colaboración con la CNDH y la Cruz Roja, el Instituto Nacional de las Mujeres, la UNAM, el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas y becas para maestrías y doctorados en derechos humanos.
En ocasiones los delincuentes argumentan violaciones a sus derechos humanos para tratar de evitar que se ejerza acción penal en su contra, pero deben comprobarlo y aunque presenten una queja, no necesariamente deriva en Recomendación.