El Manchester United frenó el entusiasmo del Leicester, incapaz de pasar del empate en Old Trafford (1-1), y aplazó la conquista del título de la Premier por el conjunto dirigido por Claudio Rainieri.
El título del Leicester, no obstante, puede llegar el lunes si el Tottenham, único que puede arrebatar el trofeo al líder, no gana en Stamford Bridge al Chelsea en el derbi londinense. En cualquier caso, el equipo de Rainieri puede cumplir su sueño el próximo fin de semana, en su campo, el King Power Stadium, con toda la afición de su lado.
El choque de Old Trafford estuvo plagado de emoción, tensión y alternativas en el juego. Los goles llegaron pronto, en los primeros veinte minutos de partido y el equipo del holandés Louis Van Gaal tomó ventaja, a los ocho minutos.
Una acción del ecuatoriano Antonio Valencia por la banda derecha llevó el balón al lado contrario del área visitante, donde estaba el francés Anthony Martial, que mandó la pelota lejos del alcance del danés Kasper Schemeichel.
Respondió el Leicester pasado el cuarto de hora. Hábil en la estrategia, aprovechó una falta frontal que ejecutó hacia el punto de penalti Daniel Drinkwater, que fue aprovechada por Wes Morgan.
El partido se abrió poco a poco después y el balón corrió de área a área. El United mantuvo la iniciativa, pero el Leicester, fiel a su estilo, rentabilizó los espacios para ejecutar contraataques peligrosos.
En ninguno de los casos llegó el gol. Kasper Schemeichel evitó la derrota del Leicester, que terminó amarrado al punto logrado con un hombre menos, por la expulsión de Drinkwater a cinco minutos del final.
tpc