Tenemos qué hablar sobre lo que haremos con nuestro tiempo en unos años. No, esto no se resuelve contestando que pasaremos horas viendo Netflix o Amazon Prime. Nos está comiendo el mercado la automatización y tenemos de dos sopas: o robotizarnos o hacernos más humanos.
A la gente que maneja camiones, por ejemplo, ya les deben estar temblando las piernas, porque la semana pasada se anunció que Singapur iba a tener pods, una especie de trenes creados por la compañía holandesa 2getthere sin conductores. Estos cambios seguramente llegarán a automóviles que se manejen solos como los que ha presentado Google y otros sectores más. ¿Qué va a pasar con todos los empleados de esa industria?
La automatización es algo que está pasando, le guste a quien le guste. Rudy de Waele, autor del libro Shift 2020, me dijo, en una charla exclusiva para El Fanzine, que todo lo que potencialmente sea automatizado, será automatizado con la promesa de un futuro mejor para todos.
Estamos, dice, en el final de una era económica donde la idea que tenemos de trabajo cambiará. Se acabarán los días en que íbamos a trabajar para producir dinero, e iniciará una nueva en la que vayamos a trabajar en lo que nos gusta y persigamos nuestra pasión ¿Podría ser este el fin de todos los Godinez?
“Happiness is the new ROI” o “La felicidad es nuevo retorno de inversión” será el lema de la siguiente era y para tener un ejemplo claro de esto, Rudy nos mostró las oficinas de Google en Sillicon Valley en el evento #GoogleAtmosphere2016 que se llevó acabo el martes pasado. Este pensamiento nos hará plantearnos cómo queremos vivir nuestra vida. Es un buen momento para que retomemos nuestros valores humanos, nuestra inteligencia y creatividad para innovar.
Rudy dejó algo muy claro: la tecnología no tiene ética. Así que para alcanzar sus objetivos, muchos se quedarán atrás e incluso podríamos ser sustituidos por algún mecanismo, robot o algoritmo, es por eso que De Waele nos invita a recuperar nuestros principios con urgencia.
La tecnología seguirá siendo un negocio y el más nuevo se llama Big Data. “Data is the new oil”, es un lema pronunciado por De Waele y que a todos nos dejó con la boca abierta. “Los datos son el nuevo petróleo”, y Facebook, Twitter, Google y Uber son los primeros en construir lo que podríamos llamar plataformas donde se extrae el “nuevo oro informático”.
El trabajo a futuro será pensar qué hacer con esos datos: desde smartbots, impresión en 3D, predicción de elecciones, smartcities, sistemas que ayuden a preservar la naturaleza y muchas de estas innovaciones ya no sólo dependen de las ciencias y disciplinas que tanto se nos motivaba aprender en la escuela, comúnmente conocidas como STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas por sus siglas en inglés), sino con acciones humanas conocidas como HECI (humanidad, ética, creatividad e imaginación).
Hace años, algunos futuristas daban conferencias sobre la geolocalización, las videollamadas y los sistemas de financiamiento común. Hoy son realidad. Si lo que quieres es conservar tu trabajo no tienes que hacerle la barba a tu jefe o quedar bien con la de RH, necesitas estar un paso más allá e innovar usando tus capacidades, talento y valores.