La organización Artículo 19 documentó en el primer trimestre de este año 69 agresiones contra periodistas en México, entre las cuales destacan los asesinatos de tres comunicadores.
En su informe trimestral, publicado en el Día Internacional de la Libertad de Prensa, la agrupación denuncia la impunidad reinante en los casos de violencia contra los medios de comunicación.
“El Estado es omiso y negligente en su obligación por brindar justicia, verdad y reparación del daño”, sostiene.
Los funcionarios fueron señalados como agresores en 33 de estos casos; entre ellos, una docena de agresiones involucran a miembros del Ejército o las fuerzas federales.
Los servidores públicos niegan su responsabilidad, y “no existe iniciativa por abrir investigaciones en contra”, lo que dificulta el acceso a la justicia y la verdad para las víctimas, insiste la asociación.
Según el reporte, este trimestre se registraron 15 amenazas, un ataque a un medio de comunicación, 19 agresiones físicas o materiales, 12 casos de hostigamiento y acoso, 8 actos de intimidación, 6 privaciones ilegales de la libertad y 5 de violencia institucional.
Han sido tres los periodistas asesinados en el mismo periodo: Marco Hernández Bautista (Oaxaca), Anabel Flores Salazar (Veracruz) y Moisés Dagdug Lützow (Tabasco).
A estos casos se le suman, aunque no haya quedado incluido en el reporte, el reciente asesinato de Francisco Pacheco Beltrán, el pasado 25 de abril en su domicilio del sureño estado de Guerrero.
Aunque la obligación de investigar estos asesinatos recae sobre la Fiscalía Especial para la Atención de los Delitos contra la Libertad de Expresión (Feadle), esta “ha eludido su responsabilidad de investigar los delitos que atentan contra la libertad de expresión”, denuncia la organización.
Desde el año 2000 hasta la fecha se registraron 93 asesinatos de comunicadores. Los últimos 20 de ellos se cometieron durante el actual mandato del presidente mexicano, Enrique Peña Nieto.
Veracruz (con 17 ataques a la prensa), Guerrero (11) y Ciudad de México (9) fueron los estados más peligrosos para los periodistas en estos meses.
Estas mismas entidades también fueron las que registraron más agresiones el año pasado, como reveló la asociación en su informe anual de 2015 “M.I.E.D.O”.
En los estados en los que se acumulan mayores casos de agresiones, afirma Artículo 19, los periodistas han optado por ejercer la autocensura para protegerse, por lo que se ha producido un retroceso de la libertad de prensa forzado.
Asimismo, en otras regiones, como Chihuahua, Puebla o Veracruz, los periodistas han creado redes de autoprotección que, a su vez, les ayuda a visibilizar su peligrosa situación.
Por otra parte, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) aseguró hoy en un comunicado que la libertad de expresión en México atraviesa “una de sus etapas más críticas” y sigue siendo una de las asignaturas pendientes del Gobierno.
Además llamó a poner fin a la impunidad ante la progresiva frecuencia con la que se producen las amenazas y agresiones contra comunicadores, a través de las “garantías necesarias para salvaguardar su integridad y seguridad jurídica”.
El número de periodistas asesinados en lo que va de año “debe motivar la atención de todas las autoridades del país, a fin de crear un frente común para atender una problemática de suma gravedad que afecta la estructura misma del régimen democrático”, señaló la CNDH. DEC