Tras dos meses de ser el único sospechoso de la agresión sexual que sufrió la periodista estadounidense Andrea Noel en la colonia Condesa, el conductor Andoni Echave logró liberarse de las acusaciones que estuvo a punto de imputarle la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PJGCDMX), basada -entre otros elementos- en acusaciones en redes sociales y un video en el cual no se podían distinguir los rasgos del atacante.
“Hubo un linchamiento, pero Andrea también lo sufrió. Es cuestión de saber manejar las cosas, ser inteligente y seguir”, apuntó.
Sin embargo, el conductor -cuyo programa fue cancelado a raíz del escándalo- explica en entrevista que los métodos que utilizó para probar su inocencia no fueron tan sofisticados, tampoco requirió a un hacker ni a un perito altamente especializado: un ingeniero en sistemas que sabe colocar cámaras de seguridad, un programa que bajó de internet a su computadora, un mouse y una tarjeta de memoria con entrada USB.
¿Cómo encontraste el video que finalmente te exculpó?
Mis abogados contrataron un perito para que este determinara que las características físicas de la persona que agredió a Andrea y las mías no son iguales. Hacemos un peritaje en el mismo lugar donde atacan a Andrea, con las repeticiones que se ven en el video. Al hacerlo, me percato de que en el edificio contiguo (195 de Avenida México) hay una cámara, me acerco a la administradora y le pido que me dejen extraer el video pero la cámara es muy antigua, viejísima. Un amigo mío lo extrae, con un programa le da el formato de MP4 para poder leerlo en cualquier computadora y así se lo damos a la Procuraduría. Ahí es cuando la imagen se esclarece y se ve mejor que el que tenía la Procuraduría.
¿Tu amigo a qué se dedica? ¿Es físico, astronauta? ¿Tiene un trabajo muy complejo?
No, es ingeniero en sistemas, tiene una empresa privada y pone cámaras de seguridad.
Esto que hiciste ¿fue muy difícil? ¿se necesitaba mucha especialización?
No es difícil, tienes que saber del tema. Mi amigo me dijo: “necesito un mouse y una USB, nada más”. Yo quiero suponer que no había un conocimiento por parte de la Procuraduría y mi amigo que tiene 10 años haciendo eso, sí lo tenía. Él extrae el video, busca el formato para leerlo en cualquier computadora y yo lo presento.
¿Qué te hubiera pasado si no presentabas esta evidencia?
Me iban a hacer una imputación directa, me iban a interrogar ante un juez e iba a haber una investigación de dos meses para aportar elementos tanto la parte acusadora como la defensa; evidencias, testimonios, todo. Muy probablemente se habría pedido una custodia: prisión preventiva o que yo fuera a firmar cada semana a los tribunales, dependiendo que el sistema considerara que yo era peligroso o no.
¿Hubo un linchamiento en redes sociales? ¿qué ha pasado contigo a partir de este caso?
Sí hubo un linchamiento mediático y en las redes sociales, pero son “haters”: gente que no tiene nada mejor que hacer y se da valor atrás de una computadora para ser agresivos. Eso también genera violencia. Sumas más tratando de encontrar al responsable, de indagar. Lo que me interesa es limpiar mi nombre: Andrea ya dijo que no fui yo, con ese reconocimiento el tiempo limpiará mi nombre.
¿Qué te dice esta situación del sistema de justicia de la Ciudad de México?
No te puedo decir que hay una deficiencia porque a mí me dijeron que yo era inocente; en el viejo sistema me hubieran metido a la cárcel. Como todo nuevo sistema, en lo que te adaptas, hay fallas y no podemos cambiarlo de la noche a la mañana. No quiero satanizarlo: es un nuevo sistema, tiene fallas y hay cosas que corregir, como en todo.
¿Qué le corregirías?
Que el sistema y las personas que realizan los peritajes no tienen los elementos necesarios para extraer videos. No poco capacitadas, tal vez no tienen las herramientas de trabajo necesarias.
¿Fuiste el trolleador trolleado?
No, para nada. Ante todo, yo trolleo, tengo un control y me divierto. Esto fue un error de apreciación, un ataque y un empuje de las redes sociales.