El Parlamento griego aprobó en las últimas horas del domingo la polémica reforma de pensiones y el aumento de impuestos, exigidas por organismos internacionales para que Grecia reciba el siguiente rescate financiero.
Los 153 diputados de la coalición liderada por el primer ministro griego Alexis Tsipras votaron a favor de esta nueva legislación, que estipula reducir las pensiones, la fusión de fondos de jubilación y la subida de impuestos para personas con medios y altos ingresos.
El principal partido de oposición griego, Nueva Democracia, votó en contra de la reforma, pero no pudo hacer nada para impedir el resultado a favor de Tsipras y sus aliados en el gobierno.
Con esta aprobación, el ministro de Finanzas griego, Euclides Tsakalotos, viajará este lunes a Bruselas (Bélgica) para convencer a sus homólogos europeos de la viabilidad de la nueva reforma para recibir el siguiente tramo del rescate.
La votación tuvo lugar en medio de protestas en la plaza de Síntagma, frente a la sede del Legislativo en Atenas, de acuerdo con información de medios locales citados por la agencia Europa Press.