Hace unos días se llevó a cabo el tradicional UFC Night 87 en Róterdam, Holanda y todo hubiera quedado en el anecdotario, pero fue en una de las peleas preliminares que Josh Emmett sufrió una de las lesiones más escalofriantes jamás vistas en la empresa de Artes Marciales Mixtas.
Emmett, de 31 años y debutante en la UFC, se enfrentó Jon Tuck y ganó por decisión dividida.
Nadie hubiera imaginado que el estadunidense se fracturó un dedo en dos partes y hasta se le podía ver el hueso.
Todo indica que la lesión la contrajo en el último round de su debut en la UFC pero decidió seguir a pesar del intenso dolor que sentía en la zona afectada.
La imagen es verdaderamente de terror. Josh subió un video a sus redes sociales de la fractura y como lo atendía un médico al término de su combate y de inmediato se ganó una ola de comentarios sobre lo asquerosa de la imagen.