La Arquidiócesis de México cargó hoy en su semanario Desde la Fe contra el matrimonio homosexual, y pidió actuar contra “peligros”, como “que los niños puedan cambiar de género” o que se abra la puerta “a toda clase de preferencias, aunque sean inmorales y absurdas”.
La última edición del semanario, publicada este domingo, lleva a su portada un artículo titulado “Tres cosas que te urge saber sobre la peligrosa iniciativa del presidente”, en relación a la propuesta de Enrique Peña Nieto para que el matrimonio homosexual sea reconocido en la Constitución.
Entre estos supuestos riesgos, de acuerdo con el texto, se encuentra la propia alteración de la Carta Magna y el Código Civil, ya que con la reforma “se abre la puerta a toda clase de preferencias, aunque sean inmorales y absurdas”.
“¿Por qué no podrá ser (el matrimonio) entre varios individuos, entre hermanos, entre padres e hijos, en fin, ¿cuál será el límite? ¡no habrá!”, considera el artículo.
La publicación suma otros dos “peligros”: que se alteren los libros de texto -en una “una campaña intensiva y perniciosa para promover el estilo de vida homosexual desde la más tierna infancia”- y “que los niños puedan cambiar de género”.
En este último aspecto, rechaza que cada persona pueda elegir su identidad de género y alerta que “a un baño de damas podrá entrar un hombre que vista de mujer o que diga que lo es, sin importar si su intención real es abusar de alguna usuaria de ese baño”.
Por ello, Desde la fe llama a sus lectores a manifestarse en contra de la “iniciativa absurda” del Gobierno, así como a educar a sus hijos para enfrentar la “propaganda de género”.
También apuesta por la oración de las familias, “para pedir al Señor que no prospere esta diabólica iniciativa”.
“Hace años, ser una persona con preferencias homosexuales era considerada una patología psicológica. Hoy en día, hay marchas del ‘orgullo gay’, ¿cómo se pasó de uno al otro extremo?”, plantea el artículo, que se responde señalando el papel de los grupos de presión internacionales.
“La homosexualidad no corresponde a una vivencia de la sexualidad ni madura ni equilibrada, y provoca, en quienes la padecen, daños físicos, psicológicos, morales y espirituales”, asegura.
Para ilustrar su nueva portada, el semanario eligió una fotografía de una niña de gesto asustado con una bandera multicolor a sus espaldas.
La semana pasada, la publicación también dedicó su editorial al matrimonio homosexual.
Un texto en el que la Arquidiócesis cargó contra los “falsos derechos” de los homosexuales subrayando, no obstante, que el catecismo católico pide la no discriminación ni marginación de los homosexuales.