Legisladores tienen pendiente de revisar y discutir reformas al Código Penal Federal para precisar las penas por falsificación de billetes, un acto ilícito que ha ido en aumento en el país y daña la confianza de la población en las instituciones.
En la investigación “Falsificación del dinero en México”, el Instituto Belisario Domínguez del Senado planteó que la estafa constituye otro problema relacionado, pues altera la seguridad de los ciudadanos y arriesga el comercio y las formas de pago, además de que atenta contra el monopolio oficial de la emisión monetaria.
Mencionó que de acuerdo con reportes del Banco de México (Banxico) en 2015 se detectaron 71 unidades apócrifas por cada millón de billetes en circulación.
Es decir 306 mil 63 piezas falsas, lo que implicó un incremento de 12.5%, en comparación con las que se captaron en 2014.
En el estudio se menciona que aumentó la comisión de ese delito a pesar de que se impone una pena de 12 años y de hasta 500 días de multa para el portador de imitaciones.
Asimismo, de cuatro a ocho años de cárcel y hasta 300 días de multa a quien lo cometa en grado de tentativa, con base en el Código Penal Federal.
Recordó que en noviembre de 2015 se presentó una iniciativa en la Cámara de Diputados para reformar el Artículo 234 del Código Penal Federal a fin de precisar las penas por falsificación de billetes.
Entre ellas imponer de seis meses a dos años de prisión cuando no se trate de delincuencia organizada y eliminar la disposición que impone la sanción de falsificación de moneda al que a sabiendas hiciere uso de una moneda en esas condiciones. Dicho proyecto está pendiente de revisión y discusión.
La investigación hace notar que el billete con más falsificación en 2015 fue el de denominación de 100 pesos -99 piezas por millón (ppm)- seguido de la designación de 200 pesos (95 ppm) y mil pesos (88 ppm).
Las imitaciones ilegales que presentaron un crecimiento en el último año fueron los billetes de 100 pesos, con 9%, y las de 500 pesos, con 3%.
Por otra parte, más de la mitad de usuarios de papel moneda, es decir 55.7%, reconocen sólo dos elementos de seguridad de aproximadamente 10, en los billetes mexicanos.
Entre esas marcas de seguridad están las marcas de agua, ventana transparente con denominación, relieves sensibles al tacto, hilo de seguridad, hilo microimpreso, hilo 3D, número oculto, doble ventana, microtextos, bandas iridiscentes, tinta que cambia de color y diferentes tamaños, entre otras.