DALLAS. La Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos rechazó hoy analizar el caso de un reo sentenciado a la pena de muerte en Louisiana, cuya defensa cuestionó la constitucionalidad de ese castigo.
Lamondre Tucker fue declarado culpable de matar a tiros a su novia embarazada en 2008 y tres años después fue sentenciado a la pena de muerte por un jurado de la Parroquia de Caddo, en el noroeste de Louisiana.
Tavia Sills tenía 18 años cuando Tucker la mató, para luego arrojar su cuerpo en una laguna. El convicto, quien también tenía entonces 18 años de edad, no era el padre del niño que esperaba su novia.
Los abogados de Tucker solicitaron a la Suprema Corte revisar la sentencia, al argumentar que ésta era anticonstitucional.
De acuerdo con los abogados, la Parroquia de Caddo, donde Tucker fue sentenciado, sólo representa el 5.0 por ciento de la población de Louisiana, pero suma casi la mitad de las sentencias a muerte impuestas en todo el estado.
“Tomando en cuenta estos hechos, Tucker pudo muy bien haber recibido la pena de muerte, no por la notoriedad comparativa de su crimen, sino debido a una característica arbitraria de su caso, a saber, la geografía”, señalaron los abogados en su apelación.
Los magistrados de la Suprema Corte, Steven Breyer y Ruth Bader Ginsburg, quienes han cuestionado si la pena de muerte viola la prohibición constitucional a los castigos crueles e inusuales, disintieron de la opinión del resto de los jueces.
Tucker pudo haberse librado de la pena de muerte si su caso se hubiera tratado en otro lugar, consideraron ambos magistrados.
El argumento es que la Parroquia de Caddo ha sentenciado a más personas a muerte que cualquier otro condado o distrito en Estados Unidos entre 2010 y 2014.