El bajo consumo de los mexicanos de productos para el cuidado de la piel, como los antiedad o protectores solares, aunado al descontento social representa una oportunidad para el crecimiento de la industria cosmética.

 

Según un estudio de la Cámara Nacional de la Industria de Productos Cosméticos (Canipec), el uso de cosméticos antiedad entre los mexicanos,  por ejemplo, está muy por debajo del que muestran los chilenos, mientras que la utilización de bloqueadores solares es siete veces menor que entre los brasileños. Estas cifras muestran que existe margen para el crecimiento de esta industria.

 

Otro aspecto que reveló el estudio realizado por la firma De la Riva Group, pero promovido por 16 empresas afiliadas a la cámara, es que el descontento social abre la puerta para una mayor expansión de esta industria. Los mexicanos utilizan la “belleza” como un mecanismo para enfrentar la realidad, señaló Gabriela de la Riva, directora de esa consultora.

 

En el marco del Primer Foro Estratégico CANIPEC 2016 Competitividad integradora. La nueva generación de consumo, José Miguel Arellano Viveros, presidente de la cámara señaló que la mayor penetración de Internet entre la población mexicana representa un nuevo canal de ventas para esa industria, pero que no ha sido explotada en su totalidad.

 

“México tiene una buena regulación de comercio electrónico, pero persiste la percepción de que las compras por este medio son inseguras, por lo que la cámara se dedicará a quitar este estigma”, mencionó.

 

Sobre el contexto internacional, mencionó que la industria se propone alcanzar los mercados europeo y asiático, así como llegar a ser potencia en materia de exportación en 2020.

 

En la actualidad, dijo, el país exporta el doble de lo que importa pero existe la necesidad de abrir mercados en Asia y afinar estrategias de comercio con Brasil y Panamá.

 

El directivo, aseguró que México cuenta con una capacidad instalada para hacer frente a los mercados: “Nos interesa estar en el mercado chino, fomentar acuerdos comerciales que nos beneficien a todos”.

 

Acotó que otro de los retos del sector es poder afinar la relación comercial  con Panamá, que tiene registros sanitarios muy exigentes: “Buscamos unificar regulaciones técnicas y trabajamos con las autoridades sanitarias para lograr entrar de manera más efectiva a este mercado”.