Argentina se clasificó este viernes para los cuartos de final de la Copa América Centenario al vencer 5-0 a Panamá, con tres goles de un soberbio Lionel Messi, que debutó en el torneo al saltar del banco en el 61, y uno de Nicolás Otamendi y otro de Sergio Agüero.
Los panameños, no obstante, jugaron una hora con un hombre menos, por la expulsión en el 30 de Aníbal Godoy.
Messi, tildado por la prensa de Chicago como el Michael Jordan del fútbol, saltó del banquillo en el 61 entre el delirio de la afición para estrenarse en la Copa América con un triplete: en el 68, en el 78 tras el cobro de un magistral libre directo, y en el 87, en un caracoleo en el área.
El astro del Barcelona maquilló la pobre exhibición de Argentina, que en muchas fases del partido se desconectó ante una aguerrida selección de Panamá.
Con esta victoria, Argentina sella su pase a los cuartos, en los que se cruzará con el segundo del grupo C, mientras que Panamá peleará por sus posibilidades ante Chile.
En las inmediaciones del majestuoso lago Michigan, el Soldier Field de Chicago acogió una accidentada primera parte: una roja en el minuto 30 para el panameño Aníbal Godoy, las lesiones del argentino Ángel di María y del centroamericano Valentín Pimentel y otras cuatro amarillas, dos para cada bando.
Y hubo poco fútbol. Sin Messi en la cancha y ante un rival duro y de repliegue, a Argentina le faltó la creatividad y no pudo explotar la letal arma del contraataque.
El gol tempranero del central Otamendi indujo a cierta indulgencia argentina.
En el minuto 7, una falta botada en el costado izquierdo por ‘El Fideo’ di María la cabeceó el defensa del Manchester City, que voló entre la fornida zaga panameña.
Al margen del tanto, solo Gonzalo Higuaín volvió a inquietar la meta de Jaime Penedo.
A partir de los diez minutos, los panameños se vinieron arriba. Al grito de “Sí se puede” merodearon el arco de Sergio Romero, que tuvo que emplearse a fondo en un remate de Miguel Camargo en el 28.
Dos minutos después, el partido se desniveló definitivamente. Gaitán recibió un manotazo de Godoy y vio su segunda amarilla (la primera la había visto ocho minutos antes).
Antes, Valentín Pimentel se lesionó al rematar un balón parado -posiblemente una fuerte contusión en la cadera- y tuvo que ser reemplazado.
Cuatro minutos antes del final del primer tiempo, hubo otra incidencia de peso.
Di María se lesionó él solo en lo que probablemente sea un desgarro muscular en el aductor derecho, como le sucedió en el Mundial del 2014 y en la final de la Copa América del 2015.
Para disgusto de la grada, que pidió insistentemente a Messi en el partido, el cambio escogido por Gerardo Martino fue Erick Lamela, el creativo del Tottenham.
A la hora de partido, los cerca de 50.000 espectadores del Soldier Field entraron en delirio. Messi debutó por fin en la Copa América al ingresar por Augusto Fernández, que ya estaba amonestado.
La hinchada dio por amortizada su inversión en la entrada al partido en el minuto 68.
Un despeje de un panameño que golpea en la cara de Gonzalo Higuaín deja solo a Messi, que define con un zurdazo ajustado al poste derecho.
‘La Pulga’ obró magia más tarde, en el 78, cuando ejecutó un libre por la escuadra.
Repitió nueve minutos más tarde en una jugada en la que regateó a dos defensores. Sergio Agüero finalizó la tarea en el 92.