RÍO DE JANEIRO. Amnistía Internacional mostró su preocupación por la situación de calamidad pública decretada este viernes por el gobernador interino del Estado brasileño de Río de Janeiro, Francisco Dornelles, y señaló que esta situación podría “agravar aún más” la situación en las áreas de salud y seguridad.
“El decreto publicado abre espacio para las restricciones en las prestaciones de servicios públicos, que pueden agravar aún más áreas como la salud y la seguridad públicas”, señaló el director ejecutivo de Amnistía Internacional Brasil, Atila Roque, en un comunicado divulgado por la organización en su página web.
A falta de menos de dos meses para el inició de los Juegos, cuya ceremonia inaugural tendrá lugar el próximo cinco de agosto en el emblemático estadio Maracaná, el Estado de Río de Janeiro se encuentra sumido en una de las mayores crisis financieras de su historia.
Dornelles declaró ayer que esta decisión permite al gobierno regional adoptar medidas excepcionales, como la obtención de préstamos y la firma de contratos sin concurso público, para así garantizar la oferta y la “racionalización de todos los servicios públicos esenciales para la realización de los Juegos Olímpicos”.
Roque advirtió, sin embargo, que “los grandes eventos deportivos no pueden realizarse a costa de la supresión de derechos” y reclamó a las autoridades regionales que aclaren a la población local cuáles serán los “impactos reales” de esta medida en la sociedad.
De acuerdo con Amnistía Internacional, lo que el Estado fluminense “necesita” es una mayor inversión, para garantizar que las Fuerzas de Seguridad estén preparadas y así “no repetir las violaciones de Derechos Humanos” que la organización viene documentando desde hace años.
“No es hora de esconderse detrás de los números. Las autoridades de Río de Janeiro tienen la responsabilidad de garantizar la seguridad para todos y todas. Si falla en su responsabilidad, sólo va a generar más dolor y sufrimiento”, sostuvo Roque.
El gobierno regional tiene una deuda pública de 66.000 millones de reales (unos 19.130 millones de dólares) y en este momento le faltan unos 19.000 millones de reales (unos 5.507 millones de dólares) para cumplir sus compromisos este año.
El estado de Río de Janeiro es uno de los más afectados por la actual crisis económica que afronta Brasil, cuya economía completó dos años en recesión en el primer trimestre de 2016. |DEC