Nick Kyrgios irrumpió en los octavos de final de Wimbledon al vencer al español Feliciano López y dejó marcado un duelo contra el campeón del 2013, el británico Andy Murray, en una jornada en la que la estadounidense Serena Williams logró su victoria 300 en el Grand Slam.
Kyrgios, verdugo de Rafael Nadal hace dos años, al que condenó entonces con 37 saques directos, liquidó a López por 6-3, 6-7 (2), 6-3 y 6-4, en uno de los partidos que había quedado suspendido anoche por falta de luz, y que formó parte del programa de un domingo especial en Wimbledon, en el que sí hubo partidos y en el que las 22.000 entradas puestas a la venta por internet se vendieron en solo 27 minutos.
“Creo que tengo las armas para vencer a Andy, pero es desde luego uno de los mejores jugadores del mundo, y probablemente el favorito en este momento cuando Novak está ya fuera”, dijo el jugador de Camberra, de padre griego y madre malaya, que hoy logró 27 saques directos contra López.
Con Kyrgios y Bernard Tomic en octavos, hay dos australianos por primera vez en esta ronda en Wimbledon desde 2004, con Lleyton Hewitt y Mark Phillipoussis, entonces.
En el cuadro femenino, Serena Williams, defensora del título, demolió a la alemana Annika Beck, por 6-3 y 6-0, para alcanzar los octavos y sumar su victoria número 300 en el Grand Slam.
Con el triunfo de ayer Serena iguala en victorias a su compatriota Chris Evert, y está a seis de la estadounidense de origen checo Martina Navratilova.
La americana, de 34 años, que tiene ya 82 victorias en Wimbledon se enfrentará por un puesto en los cuartos de final contra la rusa Svetlana Kuznetsova, décimo tercera favorita, campeona del Abierto de EU. en 2004 y de Roland Garros en 2009, que derrotó a la estadounidense Sloane Stephens, para lograr los octavos de Wimbledon, por primera vez desde 2008.