El PAN de la Ciudad de México está controlado por un “liderazgo hegemónico” que cooptó espacios de dirección y marginó a la militancia tradicional; se trata del asambleísta, Jorge Romero, recordado por ser señalado como antisemita y a quien se le atribuye el “desastre” electoral de este año en la capital.

 

Desde hace 10 años existe una tendencia a la baja en la votación por el PAN en la capital. Mientras que en 2006, este partido obtuvo 1 millón 350 mil votos de la lista nominal de la Ciudad de México, este año apenas alcanzó 203 mil votos.

 

“Tenemos varias elecciones consecutivas donde vemos un desplome en la votación del partido a nivel Ciudad de México. Es multifactorial: caímos en una lógica interna de grupos porque no ha habido la cohesión suficiente. Todos somos corresponsables de lo que está sucediendo y por eso varios militantes han solicitado la intervención del Comité Ejecutivo Nacional. Si no hacemos algo, el partido local será una losa para el 2018”, admitió el diputado federal, Jorge Triana Tena, ligado a Santiago Creel Miranda.

 

A nivel local existen tres liderazgos que agrupan posiciones en órganos de gobierno del partido: Jorge Romero, Federico Döring y Santiago Creel. Adicionalmente, están expresiones minoritarias como la de Mariana Gómez del Campo y la de Obdulio Ávila, quien por el momento “orbita” alrededor del equipo de Creel.

 

Militantes de la Ciudad de México consultados por 24 HORAS, explicaron que al interior del PAN “hay inconformidad” con el dirigente local del PAN, Mauricio Tabe, pero reconocieron que la militancia está “desanimada” y temerosa de hablar para no arruinar el discurso triunfalista de Ricardo Anaya por el resultado a nivel nacional.

 

“Esto tiene que escalar a nivel nacional. La estrategia a seguir para recuperar la confianza de los capitalinos tiene que pasar por una estrategia que se articule desde avenida Coyoacán y no desde avenida Durango. Tiene que haber una voz externa”, agregó Triana.

 

Entre las voces que, de manera aislada, han manifestado su inquietud con la situación del partido a nivel local están las de la diputada federal, Cecilia Romero, Santiago Creel, Rafael Guarneros y Elena Villavicencio, entre otros.

 

“Los liderazgos tradicionales ya no quieren participar, están desalentados, han sido desplazados; hay que escucharlos, tenemos que darnos un tiempo de autocrítica. Me incluyo, no culpo al grupo hegemónico, y los trabajos deben ser dirigidos desde el CEN del partido. Debe ser prioridad de Ricardo Anaya”, resaltó Triana.

 

Además, existe “mucha preocupación” porque se empieza a hablar de que para posicionar el PAN en la capital se deberá también establecer una alianza con el PRD, en donde emblemáticamente su posiciones sobre la agenda de derechos a interrumpir el embarazo o sociedades de convivencia han sido “opuestas”.

 

Inconformidad

 

Militantes panistas en la capital del país explicaron a 24 HORAS que al interior del instituto hay voces que quieren señalar la situación, pero no quieren dañar la imagen triunfalista del líder nacional Ricardo Anaya tras la victoria en las elecciones pasadas.