MIAMI. Un policía de Miami disparó a un afroamericano desarmado cuando alzaba las manos y rogaba a los oficiales que no le dispararán, en un caso que ha despertado nuevos cuestionamientos sobre el accionar de los oficiales en Estados Unidos.
Charles Kinsey fue herido en una pierna el pasado lunes, luego de estar en el piso con las manos en alto, cuando trataba de controlar a un paciente autista que se había escapado de un centro donde él es empleado.
En un video de celular se aprecia a Kinsey decir a los oficiales que hay un malentendido en la situación.
Los policías del norte de Miami recibieron una llamada de emergencia y se presentaron en la escena alertados sobre una persona con una pistola, pero el hombre supuestamente armado era el paciente de Kinsey, que sólo tenía un carrito de juguete en la mano.
Momentos más tarde uno de los policías disparó a Kinsey en la pierna, pero ese momento no es captado en el video.
Kinsey aseguró al Canal 7 WSVN, desde una cama de hospital, que siguió todas las instrucciones de la policía y que no se explica porque le dispararon. Kinsey se recupera favorablemente en el Hospital Jackson Memorial local.
Gary Eugene, jefe de la policía del norte de Miami dijo este jueves en rueda de prensa que han encargado una investigación al Departamento de Policía de Florida, y se negó a dar a conocer el nombre del oficial y si el policía que disparó era blanco o hispano.
“Estoy en shock por lo que acabo de ver”, dijo en la cita con la prensa la legisladora local afroamericana Federica Wilson.
Este mes se han registrado en Estados Unidos tiroteos cuestionables de la policía contra civiles captados en video en Minnesota y Luisiana, que han provocado marchas y represalias de ex soldados afroamercianos que han dejado a policías blancos muertos en Dallas (Texas) y Baton Rouge (Louisiana). dmh