NUEVA YORK. Un agente del FBI estadunidense se declaró hoy culpable de haber espiado para China, según anunció la Fiscalía Federal del distrito sur de Nueva York.
El acusado, identificado como Kun Shan Chun, nació en China en 1969, se trasladó a vivir a Estados Unidos en 1980 y cinco años más tarde adquirió la doble nacionalidad, y desde 1997 trabajaba para la oficina del FBI en Nueva York como técnico electrónico.
Según los cargos presentados por la Fiscalía, desde el año 2000 el acusado viajó hasta en nueve ocasiones a China y Hong Kong, y otros países europeos, para mantener contactos con una empresa china con vínculos con el Gobierno de Pekín.
Debido a su trabajo como técnico electrónico en el FBI, Chun tenía acceso a información “sensible y en ocasiones clasificada” que, según las autoridades, habría planeado compartir con la empresa de ofimática china Kolion.
El acusado habló de sus planes con un supuesto consultor de varias firmas, incluida una que trabajaba para el Departamento de Defensa, pero que en realidad era un agente encubierto del FBI.
En esas conversaciones “llegó a mostrarse dispuesto a facilitar el traslado de información sensible del Gobierno estadunidense a sus socios en China, incluidas personas vinculadas al Gobierno chino”, según el agente encubierto.
Las autoridades federales aseguran en el pliego de cargos que Chun mintió en repetidas ocasiones sobre sus contactos con una empresa extranjera y que entre otras cosas, hasta los padres del acusado tenían dinero invertido en Kolion.
Poco después de que la fiscalía hiciese pública la acusación, Chun compareció hoy ante un juez de Nueva York para declararse culpable.
Según las autoridades, que no habían informado hasta ahora del caso, el agente fue arrestado por el FBI el pasado marzo y después de ello confesó.
Chun conocerá su sentencia el próximo 2 de diciembre y se enfrenta a una pena máxima de 10 años de cárcel. |dec