En el marco de su 14 edición, el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) rendirá homenaje a Julio Bracho, uno de los directores más representativos del cine nacional, con una retrospectiva compuesta por siete películas. Se trata de ¡Ay, qué tiempos señor don Simón! (1941), Historia de un gran amor (1942), Distinto amanecer (1943), La corte de Faraón (1944), Crepúsculo (1945), Rosenda (1948) y La sombra del caudillo (1960).
Con más de 30 años de trayectoria cinematográfica, Bracho, quien nació en Durango, el 17 de julio de 1909 y murió el 26 de abril de 1978 en la Ciudad de México, se ha convertido en un referente único del cine realizado en México desde los años 40 hasta la década de los 70.
En el período de 1949 a 1959, en el que la época dorada del cine mexicano fue en decadencia, Bracho dirigió más de 20 melodramas, y en 1960 llegó la oportunidad que había esperado desde hacía tiempo para llevar a la pantalla grande La sombra del caudillo, novela homónima de Martín Luis Guzmán.
Además, como parte de este homenaje se realizará la exposición fotográfica Julio Bracho, el misterio de la luz crepuscular, con imágenes del archivo de la Fundación Televisa, la cual podrá ser visitada a partir del 21 de octubre hasta el 18 de noviembre en la Plaza Benito Juárez.