Esta mañana, el gobernador electo de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, acudió a declarar a la Fiscalía General del Estado (FGE), luego de ser citado tras la denuncia que interpuso el gobernador saliente Javier Duarte de Ochoa, por el delito de enriquecimiento ilícito.

 

Durante su diligencia aclaró que la cita de su comparecencia podría ser considerada como una ilegalidad, por presunto abuso de autoridad y ejercicio indebido del poder, pues la FGE debió haberse declarado incompetente y turnar el caso a la autoridad federal.

 

Calificó la denuncia de Duarte como un “show mediático” dado que la autoridad no tiene ninguna facultad para investigar estos hechos porque el delito de enriquecimiento ilícito sólo se configura para servidores públicos y él aun no lo es.

 

Se refirió al artículo 328  del Código Penal de Veracruz y al artículo 2 fracción primera de la Ley de Responsabilidades de Servidores Públicos, la cual no contempla la figura de gobernador electo como servidor público.

 

Definió a la FGE como  un “brazo más” para proteger los hechos de corrupción que se generaron durante la presente administración. (Con información de MVS)

 

tpc