ASUNCIÓN. Dos ciudadanos mexicanos y un dominicano son los últimos detenidos en relación al caso de la media tonelada de lingotes de bronce y oro que fueron decomisados la semana pasada en el aeropuerto de Asunción y que tenían a Hong Kong como destino final.
El dominicano Manuel Portes fue arrestado el sábado en un hotel en el que se encontraron varios documentos relacionados con la venta de la mercancía, según informó la Fiscalía, mientras que los mexicanos son Juan Ignacio Ontivero y Juan Carlos Jaramillo.
Los tres están imputados por un hecho punible de contrabando y permanecen detenidos en la sede de Delitos Económicos de la Policía Nacional.
Además, hay emitida una orden de detención contra el mexicano José Salazar, imputado por contrabando y que presuntamente sería uno de los compradores de los lingotes.
También está imputado, en carácter de cómplice, el belga Marc Andre Didier, quien sería propietario del avión en el que sería transportada la carga, y Ricardo Castro, despachante de aduanas de aeropuerto, por supuesta producción de documentos públicos.
Los lingotes, con un peso total de 480 kilos, habían sido declarados en el aeropuerto como “broncelina”, aunque el análisis posterior constató la presencia de oro mezclado con plata, cobre, zinc, plomo y estaño.
En la causa está también imputado el paraguayo Gregorio González, propietario de Cristal Esteño S.A, la empresa que transportó los lingotes desde la urbe paraguaya de Ciudad del Este a Asunción.
De acuerdo con la Fiscalía, esa firma estaría presuntamente relacionada con el intento de enviar un cargamento de 500 kilos de cocaína a Turquía oculta en rollos de film de plástico.
Los lingotes, que habían quedado retenidos en el depósito de carga aérea del aeropuerto de Asunción, fueron enviados este jueves a las instalaciones del Banco Central del Paraguay para su custodia y análisis pormenorizado.
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