WASHINGTON. La campaña de Donald Trump ha dejado entrever que estudia moderar su plan sobre los inmigrantes indocumentados, cuya expulsión de Estados Unidos es un punto clave en su programa, mientras el aspirante presidencial republicano negó este lunes haber cambiado de opinión, pero sugirió una solución más “justa”.

 

SI bien ello significaría modificar de manera significativa su postura sobre la deportación de migrantes indocumentados, Trump negó que su nueva postura, adelantada el domingo por su nueva gerente de campaña Kellyanne Conweay, signifique un giro de 180 grados respecto de la que mantuvo a lo largo de la contienda interna.

 

“No estoy cambiando. Queremos ofrecer una respuesta justa pero firme. Tiene que ser firme, pero queremos algo justo”, señaló el millonario de bienes raíces durante una entrevista este lunes con la cadena televisora Fox.

 

El magnate dijo que él y su campaña están trabajando “con muchas personas de la comunidad hispana” para tratar de encontrar una “respuesta” al problema de la inmigración ilegal y de los indocumentados que residen en EU.

 

Trump tiene previsto ofrecer este jueves en Colorado un discurso con detalles sobre su plan migratorio, que desde el inicio de su campaña ha girado en torno a la construcción de un muro en la frontera con México para frenar la inmigración ilegal y a crear una “fuerza de deportación” para expulsar a los 11 millones de indocumentados en el vecino del Norte.

 

En noviembre pasado, durante una entrevista con la televisora MSNBC, Trump dijo que para deportar a los millones de inmigrantes indocumentados presentes en el país, se contará con “una fuerza de deportación, y lo vamos a hacer humanitariamente”.

 

Este domingo, cuestionada al respecto, Conway dijo que ese particular aspecto de la propuesta migratoria de Trump “está por determinarse”.

 

El cambio de postura de Trump se produjo en medio de una caída general en el apoyo de los electores, además del reducido respaldo entre el electorado hispano, como lo han reafirmado recientes encuestas de opinión.

 

Un sondeo de la televisora Fox colocó a Trump con apenas 20 por ciento de apoyo entre los electores hispanos, y 66 por ciento para Hillary Clinton, en tanto que otra encuesta de las cadenas NBC y Telemundo colocaron las cifras en 76 para la abanderada demócrata y 16 por ciento para el republicano.

 

Como parte de sus esfuerzos para acercar a más hispanos a su campaña, Trump se reunió este sábado en Nueva York con líderes hispanos de una docena de estados con quienes discutió el tema migratorio y la situación del empleo y la educación.