Los fuertes vientos y tormentas ocurridos en marzo pasado causaron la pérdida de 53 hectáreas de árboles en Michoacán y Estado de México, estados donde la Mariposa Monarca pasa el invierno.
De acuerdo con la alianza WWF-Fundación Telmex, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas y el Instituto de Biología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), aunque la tala clandestina de árboles afectó el hábitat de la mariposa en los últimos años, ésta ha disminuido 40% en la zona núcleo de la reserva de la Monarca, por lo ahora la principal degradación de esos bosques se debe a cambios climatológicos.
“La disminución de la tala clandestina es una señal positiva y debe motivar a las autoridades federales, estatales y a las comunidades locales a proteger estos bosques”, argumento Omar Vidal, director general del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) en México, al señalar que, en 2014, la tala ilegal pasó de 19.9 hectáreas a 11.92 en 2015.
Por otra parte, Omar Vidal mencionó que se trabaja con un protocolo para ayudar a las mariposas a sobrevivir en las temporadas de invierno durante la caída de nieve.
Entre las acciones, se plantea retirar la nieve de las mariposas caídas cuidadosamente y, posteriormente, llevarlas a una zona donde puedan recibir los rayos del sol (sin ser extraídas de su región) para que tengan mayor posibilidad de sobrevivir.